Con las piernas y los brazos a punto de estallar, las pulsaciones fuera de todo umbral y la vista puesta en la boya de meta no hay tiempo para la emoción. El esfuerzo se lo come todo. Sin embargo, para el espectador que lo ve desde fuera, la Bandeira de Narón de ayer fue un espectáculo de infarto. Una regata memorable, con una victoria de Tirán por apenas un parpadeo de ventaja sobre Chapela en un mano a mano de los dos barcos de la Ría de Vigo, espoleados tras quedarse lejos del triunfo en la prueba inaugural de As Pontes. Solo 67 centésimas separaron a los moañeses de los beretes. Una igualdad extraordinaria que se ha extrapolado a la clasificación general de la Liga Galega A. Cierto es que solo van dos paradas en el trayecto, pero la tabla registra un triple empate a 21 en la cabeza entre Tirán, Chapela y Ares. Como se suele decir, este verano nos vamos a divertir.
El primer triunfo de la temporada para la “Mar do Con” se cimentó en ir de menos a más y en un último largo estratosférico. Porque Chapela salió a bloque. Hasta el punto de que, en la primera virada le sacaba seis segundos al barco morracense, que era último. Y aunque las distancias se acortaban, los de naranja completaron el último viraje con cuatro segundos de renta sobre Tirán y Ares. Fue entonces cuando los brazos de la embarcación azul se pusieron en modo motor. Remada a remada neutralizaron la desventaja para encarar un espectacular sprint final con los pupilos de Juan Zunzunegui. A muerte. Cuando ambas traineras rebasaron la meta, era imposible saber quién había ganado. La medición de los tiempos arrojó luz y los de Moaña levantaron los remos. Habían vencido por solo 67 centésimas. Una bandera en un suspiro.
Al contrario que Tirán, Ares se hundió en el último largo. La tripulación recién descendida de ACT y ganadora en As Pontes la semana pasada no pudo aguantar el ritmo de los barcos de la Ría de Vigo. De hecho, aunque fue tercera en la tanda de honor, Castropol le arrebató ese puesto en la clasificación final. El bote asturiano ganó en el segundo turno y completó el podio de la bandera. Tampoco Bueu tuvo su día. Cabo da Cruz B se metió por el medio y lo dejó en sexto lugar. Un mal resultado que, sin duda, volverá más peligrosa a la “Maruxía” en el futuro.
En cuanto a la parte baja de la tabla, hay que destacar el segundo puesto de Cesantes en la primera tanda. La trainera flúor se mostró muy superior a Puebla y a Meira B, que acabó de última. Solo Mecos fue más rápida. De este modo, el equipo redondelano volvió a ser antepenúltimo, puesto que replica en la general. El segundo barco de Samertolameu tendrá que mejorar para abandonar el farolillo rojo de esta temporada de aprendizaje para los jóvenes remeros moañeses en la máxima categoría autonómica.
La tripulación de verde y blanco tendrá una buena oportunidad de hacerlo el próximo sábado remando en casa. La Bandeira Illa de Samerolameu será la primera de la temporada en la Ría de Vigo. Otra ocasión para ver la bonita batalla a cuatro que se presume por el título, con Tirán y Chapela metidas en el ajo, con mucho público en el muelle. Con regatas de infarto como la de ayer, no es para menos.
