Rodrigo Corrales (Cangas, 24 de enero de 1991) afronta esta tarde el partido por el bronce en el Mundial de balonmano ante la selección anfitriona, Suecia (18:00, Teledeporte). España alcanzó esta ronda tras ganar en dos prórrogas a Noruega y caer por tres goles contra Dinamarca.
¿Cuándo sabe si va a jugar un partido?
Se conoce en la pizarra antes de comenzar el encuentro. No lo dicen antes y es para que todo el mundo tenga la cabeza puesta en el partido. Tienes que preparar cada encuentro como si fueras a salir al principio.
¿Cómo es Suecia?
A priori, ellos, al jugar en casa, van a querer terminar de la mejor manera posible. Tienen la baja de Jim Gottfridsson, que fue operado de una mano. Es muy clave para ellos porque les cambia todo el juego de ataque. Tenemos que intentar aprovechar eso. Lo primero es recuperarse mentalmente de la derrota contra Dinamarca y, físicamente, más o menos estamos todos agotados. Preparamos en la medida de lo posible el partido y, a partir de ahí, hacer nuestro juego para intentar sacar una medalla.
El primer objetivo era entrar en cuartos, lo consiguieron bien, y ahora están en la pelea por las medallas. Es cumplir lo marcado.
Obviamente, era el objetivo. A nivel individual, puede haber algún equipo superior a esta selección. Pero nosotros, con el conjunto, suplimos algunas carencias. Eso nos hace pelear todos los partidos y los cuartos de final contra Noruega fue un partido en el que no nos rendimos hasta el final. Ellos lo pudieron ganar en la última jugada, pero nosotros tuvimos esa fe y, después de dos prórrogas, lo sacamos adelante. Ante Dinamarca, ellos llegaron a ponerse en dos ocasiones con cinco goles de diferencia, pero supimos remar, volvimos al partido y tuvimos un balón para situarnos a uno a falta de 40 segundos. La sensación es mala porque es una derrota, pero nos queda ese lado positivo de poder luchar una vez más y estar cerca del rival.
¿Pagaron esos 80 minutos de los cuartos de final?
Ya no solo de ese encuentro ante Noruega. También de todo el torneo porque hay que pensar que, entre el poco descanso y los viajes, apenas preparas los partidos. Hay tan poco tiempo, que lo preparas más en el vídeo que en la pista. Quizás se nos vio algo cansados, que se vio más en la primera mitad. Pero supimos engancharnos al partido y ellos también estaban más cansados de lo habitual. De hecho, no se vio un juego tan rápido como el que se hace habitualmente. Al final, perdimos y es cierto que el ritmo fue lento porque, después de tantos partidos con la selección, quedas limitado en el ritmo.
Usted ya tiene una trayectoria, pero vería pocos partidos como el de Noruega.
Ya hemos ganado muchos marcando el último gol o haciendo una parada al final. Pero el hecho de que a falta de cinco segundos, el equipo que gana de uno tenga el balón y después lo pierda, pocas veces. Ver un pasivo, recuperar el balón y marcar a falta de un segundo, no creo que se haya visto mucho. Es una victoria que la sufrimos mucho, pero espero que sirva para que se enganche mucha gente. Es nuestra señal de identidad, que pasa por no rendirse. No se vio muchas veces algo así, siempre hay algo nuevo por verse.
Ustedes, Suecia y la final entre Dinamarca y Francia. Al final, las selecciones favoritas son las que se juegan las medallas.
Justo al terminar el partido, pasamos el control antidoping, cenamos y tomamos el avión para trasladarnos a Suecia. Dormimos por la mañana y, ya por la tarde, tuvimos un rato para pisar la pista y preparar la pelea por el bronce. Buscamos ganar para terminar con medalla y, después de un mes juntos, queremos terminar con buenas sensaciones y, por el grupo, creo que merecemos ganar. Pero jugamos ante una selección que es anfitriona y en un ambiente que será complicado.
El ambiente será en contra, pero será bueno. ¿Ayuda a concentrarse?
Sí, sí. En Suecia hubo más público que en Polonia y ayudará a motivarnos. Ellos también intentarán apoyarse en el público, pero nosotros buscaremos que en esos momentos que no se encuentren cómodos, puedan acusar la presión de jugar en casa. Que no se vean cómodos. Los dos buscamos la victoria y la previsión es que haya igualdad. Intentaremos aprovechar esa baja de Gottfridsson, que les cambia bastante el juego. Aunque tienen otros jugadores con buen lanzamiento exterior. Particularmente, a mí me gusta que haya ambiente en un pabellón y creo que a todo el mundo le gusta. Realmente, es por lo que jugamos y es algo que motiva. Es bonito que la gente se emocione cuando va a un pabellón. Además, ya estamos muy acostumbrados. Hemos jugado con pabellones llenos, tanto a favor como en contra.
