Casi tres meses de regatas, hasta 17 pruebas y cuatro barcos con la aspiración de luchar por la victoria en la Liga Galega A de Traiñeiras que comienza mañana con una regata especial, porque será en el lago artificial de la localidad de As Pontes. Un día para mostrar toda la potencia en agua dulce y, por lo tanto, con menor flotabilidad y sin el inconveniente de las olas.
El cuarteto de favoritos es fuerte y todas las tripulaciones disponen de argumentos para optar a la victoria. En la Ría de Vigo tienen esta condición Tirán Pereira y Chapela. El conjunto moañés, un histórico del remo gallego, busca el regreso a la liga ACT tras su descenso en 2021. Eso sí, todavía debe solucionar el poder participar en el play-off al no inscribirse a tiempo. Mantiene a Agustín Fernández como entrenador, que formó una plantilla marcada por la continuidad, con mucha veteranía y algunos refuerzos. En 2022 vivió en una amarga tercera posición porque estuvo siempre por detrás de Samertolameu, que ascendió, y Bueu, pero a una distancia reducida. En casi todas las regatas a menos de diez segundos. Muy cerca y a la vez lejos. “Queremos seguir creciendo como equipo para que este equipo siga lo que empezó la pasada temporada. De esta forma, poner a Tirán en el sitio que le corresponde”, expresó su preparador. Eso pasa por pelear el título.
Otra situación vive la embarcación de Chapela entrenada por Juan Zunzunegui. En la primera campaña del vigués como técnico, el club dio un notable paso adelante a nivel deportivo y cerró la temporada en la cuarta posición liguera. Ahora, un año después, la ambición es dar un paso adelante. “Queremos dar nuestro mejor nivel toda la temporada. Debería darnos para estar peleando por la liga o el ascenso”, afirmó el preparador. En otoño se movió bien para mantener la tripulación del pasado curso con veteranos de gran nivel y los jóvenes canteranos que adquieren un año más de madurez y desarrollo físico. A ello añadió incorporaciones de calidad como David Lusquiños Ballesteros ‘Pata’ y David Lusquiños Veiga.
A ello añade Chapela una magnífica temporada invernal, con grandes resultados en las regatas-test del invierno. Se mostró por delante de sus rivales en la mayoría de ellas. No es definitivo, pero sí una buena sensación.
Ares, descendida desde la Liga ACT, también presenta un barco con potencial. Una pérdida de categoría siempre supone perder elementos, pero el club coruñés supo mantenerse y cosecha buenos puestos en pretemporada.
Completa el cuarteto de favoritos la trainera que, probablemente, es la principal favorita a hacerse con el título de Liga Galega. Bueu, un año más bajo el mando de José Ferral, cedió la liga ante Samertolameu en la última regata del pasado curso y tras perder seis puntos de renta en la penúltima cita disputada en Cesantes. Después, también quedó detrás del barco moañés en el ‘play-off’ de la ACT y, por lo tanto, sin ascenso. Un doble varapalo para una trainera que se mostró dominadora hasta las dos últimas semanas de regatas en 2022 y que, quizás espoleados por el trágico final, pudo mantener a la mayoría de remeros en la tripulación. El potencial está.
A partir de ahí se abre un inmenso vacío con el resto de barcos, aunque Cabo da Cruz B puede pelear en alguna de las pruebas con los grandes. En lo referente a la Ría de Vigo, se encuentra la tripulación filial de Samertolameu y Cesantes.
El barco redondelano tiene la permanencia como único objetivo deportivo. Lo que ya es bastante tras un invierno con pocas piezas, pero refuerzos primaverales. “El objetivo es asentarse en la Liga A y asentar las bases para crecer poco a poco”, explica Benjamín Vázquez ‘Benji’, que se estrena al mando de la “Illa de San Simón”. Narón, Puebla y Samertolameu B serán los botes con los que, en principio, luche para evitar las dos últimas plazas que obligan a remar el ‘play-off’ para no descender.
Precisamente, la segunda tripulación de Samertolameu se estrena en la categoría A de la Liga Galega. Lo hace con un barco filial puro. “Creo que tenemos una media de unos 20 o 21 años con remeros juveniles o sénior de primer año salvo algún veterano que ya remó con ellos. Vamos sin presión y con el objetivo de que los canteranos se empapen del remo y disfruten”, relata su entrenador, Jacobo Gayo. Formar deportistas para la próxima década es la misión clara de esta tripulación.
El ganador de la Liga Galega y el segundo podrán disputar el ‘play off’ para ascender a la ACT, que es en septiembre. Evitar lesiones y tener una plantilla larga también será clave. Además de los equipos ya mencionados completan la Liga Galega A Mecos, Castropol y Rianxo.
