El Club Vigo abre un nuevo ciclo

El Club Vigo estrena hoy la temporada 2023/24 en el pabellón de Coia, donde recibe al Arona tinerfeño, y abre un nuevo ciclo deportivo después del éxito cosechado el curso pasado, en el que fue subcampeón de liga y disputó la fase de ascenso, y de acometer profundos cambios en la plantilla durante el verano.

La extraordinaria campaña realizada por el equipo vigués hizo que clubes con mayores recursos se interesaran por sus mejores jugadores y también por su entrenador, Pablo Parga, que puso fin a su etapa de dos años en el banquillo rojo para fichar por el San Sadurniño. Del conjunto coruñés llegó precisamente su sucesor en el cargo, el lucense Diego Taboada, que llevará las riendas que un equipo que se plantea como objetivo una permanencia tranquila.

Junto con Parga, el Vigo perdió en verano a jugadores de la talla de Marlon Mendoza, Lucas Wünschmann, Nico Robins, Marcelo Jolivot, Juan Ordóñez y Pablo Basante. Casi todo su sexteto titular.

De hecho, del curso pasado sólo siguen Iván Sienes, Daniel Ortega, Ángel Sánchez, Aarón Molares, Francisco Dieste y Joel García, mientras que para suplir a los que se fueron, la entidad incorporó a Juan Contreras, Antonio Mondéjar, Pau Mena, Pau Delós y Guillermo Salmerón, además de recuperar a los canteranos Carlos López y Luis Linares.

Con todas estas modificaciones, el Club Vigo inaugura hoy una nueva etapa en la que el rendimiento del equipo es todavía una incógnita y su crecimiento debería verse a lo largo de la temporada.

Porque, además, el bloque de Diego Taboada se enfrenta a un duro calendario en este comienzo de curso. Su primer rival, el Arona Playa Cristianos, es uno de los más fuertes de la categoría y parte con el objetivo de regresar a la Superliga, en la que ya militó en otros tiempos. El cuadro tinerfeño cuenta con una plantilla con jugadores de alto nivel y notable experiencia. Alexis Valido, el colocador Vladislad Susickis, Carlos Javier y Andrés Hernández y el recién incorporado Antonio Saucedo son los principales pilares de un equipo que llega a Vigo con la intención de sumar los primeros puntos.

El Vigo, mientras tanto, confía en el apoyo de su afición, que la pasada temporada llenó el pabellón de Coia en varios encuentros.