Las alfombras de Ponteareas van ya camino de la Unesco

Tapiz floral que los alfombristas de Ponteareas dedicaron al Papa Juan Pablo II, en su visita a Santiago en 1982.
photo_camera Tapiz floral que los alfombristas de Ponteareas dedicaron al Papa Juan Pablo II, en su visita a Santiago en 1982.

La tradición de arte efímero de las alfombras de flores para el Corpus, que elaboran los alfombristas ponteareanos, es candidata a “Patrimonio Cultural Inmaterial”

El Ministerio de Cultura presentó ya a mediados de marzo la candidatura de “La Tradición de la creación de alfombras florales y composiciones rituales con materias naturales”, en su sede de París, para “entrar en la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”. Petición que será evaluada en 2025. Se trata de una candidatura Internacional impulsada por varios países: Bélgica, México, Italia, Malta y España. Y a propuesta de la Xunta, las alfombras del Corpus Christi de Ponteareas, únicas con expediente BIC, son las que representarán a Galicia dentro de esta candidatura. Por eso, desde la Asociación de Alfombristas do Corpus Christi “queremos agradecer a la Xunta la elección de nuestras Alfombras de flores como representantes de Galicia en esta candidatura internacional que promueve el Ministerio de Cultura del Gobierno de España”.

Ponteareas alcanzó especial fama por la Fiesta de Corpus Christi, en la que, sus vecinos, confeccionan artísticas alfombras de flores naturales para el paso de la procesión del Santísimo, desde hace más de doscientos años: “la celebración más antigua de la península ibérica”, tal y como señalan desde la Asociación de Alfombristas do Corpus Christi. 

“Se trata de una obra colectiva que expresa la cultura popular de las gentes de Ponteareas que han sabido conservar y promover esta celebración reconocida como Fiesta de Interés Turístico Internacional”. Y el Domingo de Corpus, más de veinte alfombras llenan calles y plazas. Más de un kilómetro de tapices florales bordados en el asfalto, con profusión de colorido, creatividad y belleza. Miles de flores, matas y arbustos, deshojados y mezclados para obtener una auténtica obra de arte efímera, y, por tanto, perecedera y a la vez eterna.

“La importancia del patrimonio cultural inmaterial se transmite de generación en generación y eso sucede en nuestros Portales de Corpus, y las Alfombras son por si mismas, patrimonio cultural inmaterial que recoge prácticas y expresiones vivas heredadas de nuestros antepasados y transmitidas a nuestros descendientes”, expresan desde la asociación de alfombristas.

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