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Tui rescata una joya medieval en la ruta de los molinos del Tripes

Los integrantes de la Asociación Muiñeiros do Río Tripes iniciaron ya los trabajos de limpieza de los terrenos en los que está el molino
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La asociación Muiñeiros do Tripes inició la recuperación de la edificación y terrenos que rodean a la construcción más antigua
nnn Los trabajos de recuperación del molino del que se guardan registros más antiguos comenzaron ya a orillas del Tripes. Esta construcción, que podrían tener más de siete siglos de antigüedad, es también la más cercana al casco urbano de Tui y uno de los que se conservan su estructura de los más de medio centenar que, según recoge el cronista oficial tudense, Ernesto Iglesias, había en este río que surca el Aloia. Esta primera intervención contó con la participación de los integrantes de la Asociación Muiñeiros do Río Tripes, el alcalde de Tui, Enrique Cabaleiro, el concejal de Patrimonio, el propio cronista de Tui así como historiadores de la zona. 
La construcción podría tener más de 700 años, ya que los primeros escritos que hacen referencia  al mismo data de 1371. Estos documentos se encuentran en el Archivo catedralicio, y en ellos se refieren al molino do Mañoco, que hacía parte de los 25 que jalonaban el curso del Tripes y que constituían un verdadero granero que abastecía a toda la comarca. Esta edificación también está recogida en el catálogo de Patrimonio de la Xunta, donde se le denomina como da Peregrina, nombre que podía derivar de su cercanía al Camino Portugués. 
El cronista oficial de Tui, Enrique Iglesias, sacará en breve un libro en el que recoge todos los molinos del municipio. Entre ellos aparecen los del Tripes, en sus dos tramos, que alcanzaron las 50 edificaciones en las que se molía el grano, la aceituna  y daba apoyo a los gremios de curtidores de la ciudad al moler también las semillas que se utilizaban para teñir las pieles. Y todo ello a escasos metros del centro de la ciudad, de ahí su gran importancia en la economía del Tui de la Edad Media.  
El molino de Mañoco se trata de un edificio rectangular en perpiaño y  cachotes, cubierto con un tejado a dos aguas, con dos bocas para alimentar  las dos ruedas que poseía en un inicio. El molino tiene numerosos signos  lapidarios, principalmente cruces, en sus paredes. En la actualidad el estado de conservación es bastante aceptable estructuralmente, aunque le falta el tejado. La Asociación de  Muiñeiros de  Tripes logró recientemente un acuerdo con la Fundación Félix Rodríguez, perteneciente a la Diócesis de Tui-Vigo, a quien pertenecen los terrenos y la edificación. La asociación, con una amplia trayectoria en la recuperación de este patrimonio cultural en el entorno del río  Tripes, espera recibir ayuda de otros organismos e instituciones con el fin de impulsar la restauración y puesta en valor de este molino. 
Al ser el más próximo la ciudad servirá, una vez recuperado, como lugar de exposición y entro interpretativo de la ruta que sigue el curso del Tripes. El acceso al molino se efectúa a través de un paso inferior de la calle Martínez Padín a lo que se llega desde la plaza de Manuel Caramés, en pleno Camino de Santiago Portugués y a menos de 300 metros de la catedral tudense. n
 

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