El responsable del almacén pirotécnico ilegal de Paramos, en Tui, que explotó en mayo de 2018, causando la muerte a un matrimonio, decenas de heridos y cuantiosos daños materiales, ha reconocido ser el responsable de los hechos y aceptará 4 años de prisión. De esta forma, la vista, que lleva años de retraso, se saldará por vía penal con un acuerdo de conformidad. No será tan sencillo por la vía civil, donde las partes pelearán para despejar quién se hará cargo de sufragar los gastos.
La Fiscalía y las partes habrían llegado a dicho acuerdo, que rebaja en 10 años la pena de prisión inicial solicitada, antes de que esté señalada la vista en la Audiencia provincial.
Los términos del acuerdo recogen esa condena de 4 años por dos homicidios imprudentes, además de 27 delitos de lesiones y un delito de daño catastrófico, según informó a Europa Press el portavoz de la Plataforma de Afectados de Paramos, Salvador García.
Además, se acordó también que el investigado, Francisco G.L. sea inhabilitado para oficio o profesión relacionada con la actividad pirotécnica durante 18 años, y que se le imponga una orden de alejamiento de la zona cero de la explosión, de manera que no pueda aproximarse a menos de un kilómetro durante 6 años.
Al margen de este acuerdo relativo a la responsabilidad penal, queda por dilucidar todavía la responsabilidad civil, ya que la explosión produjo daños en 430 viviendas y casi 80 vehículos. El portavoz de la Plataforma de Afectados recordó que la estimación de daños supera los 12 millones de euros. Esto obligará a celebrarse un juicio, igualmente, aunque solo centrado en lo que supone las indemnizaciones para todos los afectados, entre ellos los dos hijos del matrimonio fallecido, menores en el momento de los hechos, y que lo perdieron todo en aquella explosión.
