GEMMA MARQUÉS Artista plástica y gestora de la Casa Taller de A Guarda

"Las mujeres comunes son las que mueven el mundo con sus pequeñas acciones"

Gemma durante el proceso de creación del mural.
photo_camera Gemma durante el proceso de creación del mural.
 La mujer y su universo es una de las constantes en el obra de Gemma Marqués, una artista gráfica y creadora de mundos que ha encontrado en A Guarda el lugar ideal para trabajar y expandir su obra. De su casa-taller han salido proyectos como "Anónimas, retratos de musas cotiás", en el que recoge el trabajo invisible de mujeres de la comarca desde "una perspectiva feminista". De ahí surgió el mural que ilumina los muros del campo de fútbol del Alivio, en Tomiño. Es la cara de otra mujer, Sara, que animaba a su equipo todos los partidos y que a sus 105 años es una de las musas anónimas que esta artista rescata del olvido. Ahora da clases por internet en la UNED  sobre "La mujer artista del siglo XX y XIX", pinta acuarelas inspiradas en el mar rompiente de A Guarda y prepara un curso estival sobre el arte de las marinas en acuarela. 
 ¿Qué le hizo centrar su trabajo en esas "mujeres anónimas"  y recogerlas en tu obra? 
Siempre he estado rodeada de grandes mujeres, luchadoras, fuertes,  en mi familia y en mi entorno. Me parece oportuno hacerles un pequeño homenaje retratándolas y haciéndolas protagonistas de los cuadros, murales y libros. Ya es hora de darles el lugar que se merecen. Por eso autoedité un libro con varias acuarelas y un texto feminista de Lola Costas que va por la segunda edición.
¿Qué es lo que más le impresionó del papel de las anónimas en la sociedad actual? 
Las mujeres comunes son las que mueven el mundo, con sus pequeñas acciones diarias, sus cuidados y soporte, hasta con sus trabajos, precarios o no. Tienen una labor fundamental en la sociedad desde siempre, aunque casi nunca reconocido ni valorado. 
¿Qué falta para que sean reconocidas? 
Concienciar a la sociedad del valor de su trabajo, de sus valores, sus ideas, de su lucha para tener el lugar que merecen en el mundo.
¿Qué quiso transmitir con el mural en el que pintó a Sara, que con sus 105 años, es la vecina más veterana de Tomiño? 
Hasta hace poco iba al campo de fútbol a animar al Tomiño F.C. y por eso quisimos rendirle un homenaje. Lo pinté partiendo de una fotografía de Pily Reñones, fotógrafa muy reconocida que retrata como nadie el alma de las mujeres, y fue un encargo del Ayuntamiento de Tomiño para el Día de la Mujer.
Vive en la villa de A Guarda, una localidad alejada de los grandes centros artísticos o salas de exposiciones, ¿cómo se salva esa distancia o le condiciona de alguna manera? 
Aquí se vive estupendamente. Tengo tranquilidad y paz para crear y una comunidad de amigos y alumnos muy especial. Tengo espacio y luz natural, vistas al mar. Ahora con internet no hay problema, la gente te conoce por las redes sociales. Ya no hay grandes centros de arte, exceptuando las grandes capitales, donde es más fácil llegar al público y éste se mueve cada vez más hacia experiencias en el rural.N

Te puede interesar