Una taxista de Nigrán, la primera en España con anuncio propio

María Muñoz, celebró ayer su segundo aniversario como taxista en Nigrán colgando en las redes sociales el que probablemente sea el primer spot publicitario rodado en España por un taxista particular para promocionar los servicios que oferta. Se trata de siete anuncios diferentes realizados en tiempo record-poco más de un mes- que cuentan otras tantas historias. El último, precisamente el que se publicó ayer es una especie de remix de toda la campaña.

El templo votivo de Panxón, la plaza del Concello, la playa de Aréa Fofa, el parque empresarial de Porto do Molle, o la vivienda de Belinda Lorezo Lareo en Gondomar, una de las actrices del spot son algunas de las localizaciones que es posible apreciar en el visionado del anuncio. "El spot salió tal y como había imaginado. Para las localizaciones pedimos permiso al Concello de Nigrán", relató María, emocionada al relatar su debut como guionista, productora y directora.

Para esta tarea ha contado con dos profesionales del mundo de la imagen: el videógrafo de All Vídeo, José Ángel Lago, y el fotógrafo Daniel Ibañez, que ha realizado el making off. El spot arranca con la imagen de los tobillos de María, que camina en tacones hacia el coche. Lejos de constituir un estereotipo de seducción femenina, el taconeo , "que se ven y que suena" está inspirados en uno de los temas de la cantante y actriz extremeña "Bebe". "Que se oigan tus pasos, que no tienes nada que esconder" aclaró. Lejos de ofrecer una imagen soez o seductora, María pretende romper moldes y proyectar el lado femenino de esta profesión "tradicionalmente desempeñada por hombres. No se espera que una profesional del taxi siga siendo femenina cuando trabaja y esto es precisamente lo que quiero reivindicar en el spot", señaló.

No es la única imagen que rompe clichés habituales. Así, se recurre a la figura paterna que lleva a su hijo en taxi y a dos novias que insinúan un beso al salir de la iglesia. Lo tenía todo visualizado en mi mente, confiesa María y ha quedado como esperaba. Su motivación, el trabajo diario en el taxi. "Quizá sea porque no lo veo como un trabajo", explicó. n