Alumnos de Nigrán pondrán en práctica una iniciativa pionera en la comarca lanzando una sonda a 33.000 metros para recabar datos que aplicarán en sus estudios.
n n n Bajo el lema “De Panxón ó ceo” una veintena de alumnos de primaria y secundaria de Panxón pondrán en práctica un proyecto cuanto menos novedoso en la comarca. Se trata del lanzamiento de una sonda estratosférica que, con los datos recabados, les servirá para completar temarios de asignaturas como matemáticas, biología, geografía o ciencias sociales, entre otras. Así pues se servirán de un globo de dimensiones determinadas que gracias al helio con el que irá cargado conseguirá elevar un cubo de en torno a los 50 centímetros cuadrados equipado en su interior con tres cámaras GoPro, baterías, sondas, termómetros y un receptor GPS que les facilitará a tiempo real tanto trayectoria, altitud como la posición de caída además de un paracaídas que se abrirá cuando el globo reviente y de esta manera no acabe destrozado al impactar contra el suelo tras el descenso desde 33.000 metros.
Durante su viaje, que no durará más de tres horas, la instrumentación irá recogiendo datos que más tarde serán volcados a un ordenador y les servirá para estudiar el entorno en general. Cabe destacar que la iniciativa se compondrá de dos lanzamientos, el primero y más importante lo llevarán a cabo en la segunda quincena del mes de mayo desde el monte de Chandebrito, mientras que el segundo se realizará desde el Gaiás, en Santiago de Compostela, hacia el mes de junio. “Hemos querido hacerlo de esta manera para homenajear a todos los vecinos y voluntarios que colaboraron activamente tras los estragos causados por el fuego en esta parroquia”, explicó Rafael Lores, director del centro educativo.
Para hacer posible esta “hazaña”, los integrantes del proyecto tienen que ceñirse a unos parámetros técnicos muy determinados ya que el conjunto no puede superar el kilogramo de peso ya que sino complicaría el ascenso, por otro lado deberá de calcular las dimensiones del globo así como la cantidad de gas necesaria para alcanzar la altura deseada, y el último factor y no menos importante es anticiparse a las condiciones meteorológicas en el momento del despegue, ya que variables como temperatura, velocidad del viento o incluso precipitaciones darían resultados muy diferentes en cuanto a su posicionamiento. La iniciativa cuenta con un presupuesto relativamente elevado llegando a alcanzar los mil euros, aunque el presidente de la empresa Delta Vigo afincada en Porto do Molle, Francisco Puga, que acudió a la presentación en calidad de invitado, adelantó que propondrá a la compañía su financiación. Las explicaciones técnicas del proyecto corrieron por cuenta de Óscar Prego, profesor de biología del centro que agradeció la colaboración de la empresa privada como del Concello además del alumno Álex Martínez que con mucha sorna complementó al docente en las diferentes aclaraciones.
Con el fin de contextualizar el recorrido que hará la sonda se sirvieron de la iniciativa llevada a cabo desde Barcelos, prácticamente de idénticas características. Ésta despegó de la localidad lusa y aterrizó en Ribadavia, en una finca privada, y fue devuelta por un vecino a sus propietarios. La que lanzarán en mayo calculan que caerá en Braga, aunque cabe una ligera posibilidad de que se desvíe y finalice en medio del océano, con lo que todo el trabajo no serviría de nada.
Para minimizar riesgos, la veintena de estudiantes del Centro de Educación Especial de Panxón por trastornos de conducta se sirven de un programa informático de simulación variable que va desde las 72 hasta las 108 horas y hacerse así una idea de su comportamiento en el aire. Al encontrarse en el dominio aéreo del aeropuerto de Peinador, se verán en la obligación de solicitar un permiso especial a AENA para que su experimento no interfiera con la actividad habitual de las aeronaves. n
