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El naval hila su presente a cruceros de lujo y el futuro a la minería submarina

Camilo Fernández (Regenasa), Albino Rodríguez (Provigo), Álvaro García (Barreras) y Daniel Gesto (Aimen).
photo_camera Camilo Fernández (Regenasa), Albino Rodríguez (Provigo), Álvaro García (Barreras) y Daniel Gesto (Aimen).

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 La construcción naval vive una etapa de recuperación que a los más veteranos les recuerda a épocas pasadas. El sector está resignado a trabajar con ciclos económicos que le dan poca estabilidad. La evolución del empleo en los astilleros ha sido negativa desde la década de los 70 y la industria auxiliar ha diversificado su actividad para poder sobrevivir a las peores épocas.
La Fundación Provigo celebró ayer una jornada sobre este sector en la que se destacó que el naval de la Ría de Vigo se ha centrado en tres mercados muy concretos. El más importante, los cruceros de lujo, pero también los oceanográficos y los pesqueros.
Según destacó Álvaro García, director de desarrollo de negocio de Barreras, el astillero vigués centró su foco en el segmento de cruceros de lujo al observar que los únicos tipos de buques que experimentaban un alza en las contrataciones eran los de pasajeros, concretamente los cruceros. De hecho, Fincantieri (Italia) tiene una cartera de pedidos de 87 cruceros, 31 de ellos en construcción. Para poder optar a estos modelos, el astillero renovó maquinaria, especialmente de corte de chapa así como soldadura, para poder dar mejor forma a sus piezas y reducir las deformaciones. Sobre la posibilidad de abordar en Galicia la construcción de cruceros, García señaló que es imposible por el tamaño de las gradas, y que solo sería posible en Navantia Ferrol. De hecho, Barreras proyectó en 2008 una ampliación de sus instalaciones para apuntar a este sector, pero nunca se llegó a acometer.
El director general del Grupo Regenasa, Camilo Fernández, señaló que el presente del sector naval pasará por buques tecnológicos, porque los offshore tradicionales se realizan en China con muchas ayudas estatales a interés 0.
Sobre la inestabilidad del sector, Fernández destacó la necesidad de realizar análisis que permitan predecir cuáles serán las tendencias de mercado, y apuntó como posibles nichos de mercado la offshore eólica, como los aerogeneradores de Navantia Ferrol para Iberdrola, pero también buques de suministro para la minería subacuática, que tanto trae de cabeza al sector pesquero, pero que ante la escasez de minas en tierra cada vez se vuelve más como una alternativa que podría elevar la demanda en el scetor.
Desde Aimen, el director de manufacturas avanzadas, Daniel Gesto, señaló como tendencias constructivas hacia 2050 la fabricación de buques mediante módulos, que permita reducir sustancialmente los costes de cambiar de actividad un buque. También destacó el empleo de nuevas tecnologías en el sector como la impresión 3D e incidió en la necesidad de digitalizar el sector.

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