Inmobiliarios gallegos preguntan a Hacienda cuándo adaptará los valores catastrales
nnnSe avecina un varapalo para la recaudación de los ayuntamientos, que tendrán que adaptar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), más conocido como el recibo del catastro, a una reciente sentencia del Tribunal Supremo. Según el fallo los propietarios de fincas recalificadas como urbanas pero en las que no se ha construido ningún tipo de dotación podrán pagar el impuesto como si se tratara de suelo rústico.
La Federación de Empresas Inmobiliarias de Galicia (Fegein) ya ha salido al paso y ha preguntado a Hacienda cómo y cuándo piensa adaptar los datos y valores catastrales.
de una recalificación
La sentencia del alto tribunal se remonta a un conflicto que la administración pública mantenía con unos 300 propietarios de fincas en Badajoz. El ayuntamiento de esta ciudad decidió, en 2007, recalificar varios terrenos rústicos y darles la consideración de urbanos, por lo que muchos propietarios vieron cómo el impuesto que pagaban en concepto de IBI era, en algunos casos, hasta cien veces más. El problema llegó con la crisis, que supuso la paralización de la mayoría de los planes urbanísticos, atrapando a propietarios y promotoras que se encontraron en posesión de parcelas con unas altas cargas impositivas y poco o nulo rendimiento económico por lo que reclamaron y ganaron.
Desde Fegein quieren saber “cómo se van a adaptar los datos y valores catastrales del suelo calificado como urbano no desarrollado al contenido de la sentencia del alto tribunal”, que supone “acomodar la valoración catastral al principio de capacidad económica real” porque, señala el fallo, “valorar con fines tributarios un inmueble por encima de su valor de mercado, supone gravar una riqueza ficticia o inexistente”.
El incremento del IBI es un balón de oxígeno para los concellos endeudados pero una presión recaudatoria más para los ciudadanos por eso para Benito Iglesias, presidente de Fegein, “es necesario aliviar y reducir la carga fiscal a las familias gallegas reduciendo el IBI un 10% y manteniéndolo congelado los próximos años no aplicando la actualización del IPC”.
En el Concello de Vigo, según los datos de la Dirección General del Catastro, hay 204.653 recibos de IBI urbano y 240 de rústico. En la provincia de Pontevera son 766.736 urbanos y 271.534 rústicos. n
