El internacional azulgrana protagonizó la trigésima Copa del Barça y esta semana anunciará su posible marcha
Andrés Iniesta fue el gran protagonista de la victoria del Barcelona en la final de la Copa del Rey ante el Sevilla (0-5). En el Wanda Metropolitano, donde Iniesta levantó su 31 título como azulgrana y la Copa número 30 para el Barcelona, el capitán de los barcelonistas vivió una noche irrepetible, abarrotada de buenas sensaciones y emociones. Marcó un gol, dio un espectáculo futbolístico y sólo le quedó salir a hombros. Valverde escenificó esto último cambiándole a poco de finalizar el partido y el campo se vino abajo, a lo que también contribuyó el aplauso sincero de la mayoría de los sevillistas.
Ahora, el barcelonismo vive con el corazón encogido ante el desenlace inminente del futuro de su capitán, quien parece que aterrizará el curso que viene en la Liga de China y pondrá punto final a su larga relación de amor con el Barcelona y, cabe esperar que después del verano, con la selección.
Aunque hay quien aún alberga la posibilidad de que esto dará un giro de 180 grados, todo apunta a que el que ha sido uno de los mejores jugadores de todos los tiempos que ha dado el fútbol español tenga ya decidido que su etapa en la Liga pasará a mejor vida este verano y que acepta el desafío de jugar en Asia, en una Liga con muchas pretensiones, pero claramente a años luz de los mejores torneos europeos y suramericanos.
El Barça y el barcelonismo se preparan sin desearlo para días de emociones fuertes. A partir de hoy, el correo proveniente del club catalán o su página en internet serán los puntos calientes donde aparecerá la convocatoria de prensa de Andrés Iniesta. No se va un cualquiera, sino un futbolista 10 en todas las dimensiones, dentro y fuera del campo, a quien no discute ningún aficionado, ni del Barça, por supuesto, ni de su larga lista de rivales. Porque tras la final del sábado, el manchego comentó que esta semana hará pública su decisión sobre su futuro. Iniesta, que no quiso avanzar su postura, señaló que tiene claro lo que va a hacer: "Tengo ya 34 años y uno ya es maduro para tomar ciertas decisiones".
Tras abandonar el campo entre aplausos, incluidos los de la afición sevillista, el internacional azulgrana comentó que "es increíble sentir ese cariño de la gente. Para uno, como persona y deportista, es una cosa que se clava muy adentro. Realmente es especial". Iniesta puede estar viviendo sus últimos días como azulgrana.
Cuatro días de fiesta antes de atacar la Liga
Después de conquistar brillantemente el título copero en el Wanda Metropolitano (0-5 frente al Sevilla), el técnico del Barcelona Ernesto Valverde ha decidido conceder cuatro días de fiesta a sus jugadores antes de acometer el ataque final al título de Liga.
Y es que el equipo no volverá a ejercitarse hasta el próximo jueves, día en el que han sido citados los futbolistas en la ciudad deportiva Joan Gamer para regresar a los entrenamientos. El siguiente objetivo es el partido en Riazor del próximo domingo con un premio extra: si ganan los azulgranas habrán conquistado matemáticamente el título, el séptimo de Liga en la última década.
Tras ganar en la noche del sábado el título en Madrid, la expedición regresó a primera hora de la noche a Barcelona y una parte de los componentes del equipo celebraron el título en una sala de fiestas de la parte alta de la ciudad. El título es el primero de Copa que consigue Ernesto Valverde, que llegó el pasado verano al club. n
