Diego Piñeiro, del Ademar, recibió su primera convocatoria con la selección española
Diego Piñeiro (Vigo, 12 diciembre de 1994) recibió la llamada de la selección española para disputar dos encuentros amistosos ante Túnez y Catar. El combinado está formado por jugadores menores de 27 años.
¿Cómo recibió la llamada de la selección?
Estoy muy ilusionado. Me llegó de sorpresa. Me dijeron que iba a estar en la convocatoria de una selección absoluta que es un poco más joven y estoy encantado. Tengo ganas de aprovechar la oportunidad. Somos jóvenes y dentro de unos años tendrán que renovar la selección. Tenemos que intentar aprovechar estos partidos.
¿El objetivo es dejar una buena impresión?
Está claro y además intentaré disfrutar de la experiencia, que es muy bonita. Desde pequeños trabajamos para jugar en la selección y tengo ganas de que empiece. Pasé por las distintas categorías inferiores y coincido en esta convocatoria con varios jugadores de mi generación. Voy a retomar el contacto con ellos porque. más allá de que jugamos en la misma liga, lo pierdes con algunos. Ya hace dos años que se terminó la etapa de las categorías inferiores y tengo ganas de volver a vestir la camiseta de la selección española. Apetece jugar.
Van varios jugadores del Ademar León, ¿significa que están haciendo bien las cosas?
Vamos tres del equipo. Tenemos muchas ganas de trabajar y hacerlo lo mejor posible. Además, coincido con hasta seis jugadores con los que estuve en categorías inferiores de la selección.
¿En qué situación está el Ademar?
Después de pasar una crisis fuerte hace dos años, ahora volvemos con más fuerza que nunca. Esta temporada quedamos segundos con el récord de puntos en liga. Estamos pendientes de recibir una invitación para la Liga de Campeones y, si no la recibimos, iremos a disputar la EHF. El día 24 nos confirman la competición que disputaremos. El Ademar León va hacia arriba. Tiene mucha historia, mucha afición y es algo que se nota.
¿Sirvió la crisis de reinicio?
Igual sin la crisis, no podíamos asomar los jóvenes. A pesar de que los sueldos siguen siendo lo que son, a mí me ha venido bien porque recibí una oportunidad que, en otras circunstancias, no la hubiera vivido.
¿Tiene futuro el balonmano?
Creo que sí. Ahora la liga española está creciendo y, de hecho, todos los equipos se están reforzando bien. Es una competición que va a ser más competitiva el próximo año y es muy complicado saber el equipo que pueda quedar segundo o tercero, por detrás del Barcelona. Hace unos años se vivió un bajón importante, sería de tontos no negarlo.
¿Se planteó irse al extranjero?
Siempre tienes alguna oferta y la oportunidad de irte. En mi caso, estoy muy bien en León, ya llevo seis años, soy el capitán y me tratan muy bien, como en ningún sitio. En un futuro me gustaría jugar en otras ligas y países, pero, por ahora estoy bien aquí.
Queda claro que en su día acertó al irse a León.
Siempre digo que es la mejor decisión deportiva que tomé, con diferencia. Lo que pasa es que es fácil verlo ahora, después de tomarla. Con dieciséis años, irme a León desde Vigo era una prueba de fuego. Me salió redonda. He conseguido muchas cosas y sigo muy ilusionado.
¿Ya es un leonés más?
Sigo siendo gallego, pero estoy integrado aquí. Mis mejores amigos son de León y estoy cómodo. Los primeros meses fueron duros porque estaba sólo, en una ciudad que no conocía y con 16 años. Tenía que aprender a cocinar y hacer todo por mí mismo.
¿Cómo valora la situación del balonmano en Vigo?
El tema económico afectó mucho, especialmente al Octavio, que es mi club. Me gustaría que volviera a Asobal, pero la perspectiva es a muy largo plazo. Da pena que un club tan grande como el Octavio se encuentre donde está. Cuando decidí venir a León, incluso tenía una oferta económica mayor ahí, pero me decidí por el tema deportivo. Era una opción mejor.
Coincide en el Ademar con Juanín García, ¿cómo es de compañero?
Tienes una impresión distinta a la real porque viene del Barcelona y lo ganó todo. Imagínate, muchos de nosotros crecimos viéndolo jugar y ganar el Mundial y Ligas de Campeones. Es de los mejores jugadores de la historia de España, por no decir el mejor. Sin embargo, se implica mucho, es un compañero diez y está muy pendiente de los jóvenes. Es el veterano y, la verdad, ejerce como tal.
