Según un informe elaborado por la ATA, en base a los datos publicados por Seguridad Social, en hay 3.328.399 trabajadores por cuenta propia. De esta cantidad, solo el 30% manifiesta ser autónomo por vocación. En sentido contrario, el 70%, es decir, más de 2.300.000 personas, confiesan que preferirían un trabajo por cuenta ajena a pertenecer a este colectivo y que lo hacen por estricta necesidad.
De nuevo, el gobierno PSOE-Podemos, ese del “Es la cuarta vez que se lo contesto. Se lo voy a decir con mucha claridad: este gobierno no va a subir los impuestos a la clase media y a la clase trabajadora” (María Jesús Montero, dixit), va a volverlo hacer. Va a volver a faltar a su palabra, va a reincidir en su pantomima, va a volver a instalarse en la mentira.
La quiebra del actual sistema de pensiones es una realidad indiscutible. Sin embargo, nuestros gobernantes no quieren ni mentar la bicha y no hacen absolutamente nada para adaptar el modelo a la nueva realidad económica y social, más que mantener un interesado código de silencio sobre el particular. Eso sí, el gobierno con mayores ministros desde Suárez aprueba, años tras año, presupuestos a déficit manteniendo o incrementando gastos, transferencias y subvenciones insensatas en el actual contexto económico.
Siendo partícipes de esta incontinencia de gasto, se plantean ahora la aprobación de una subida histórica de impuestos a la clase media y trabajadora. Precisamente a ese colectivo que no ha encontrado otra alternativa laboral que el autoempleo y que sufre de las carencias del sistema como nadie. Después del Estado, es el principal agente empleador de España (casi 900.000 puestos de trabajo asalariado) pero no tienen cobertura de desempleo, reciben ingresos irregulares, responden personalmente de las deudas, soportan la mayor carga fiscal de Europa, tienen mayores dificultades de acceso a la financiación, trabajan como recaudadores de IVA para el Estado, … Pues ellos, han sido los elegidos para intentar paliar, en parte, el descomunal agujero que muestra el sistema español de pensiones. Un atraco histórico sin precedentes. Seguro que no por gusto, 90% de los autónomos se acogía a la base mensual mínima de cotización (294 euros). Pues el gobierno de los obreros españoles les obligará a partir de ahora a cotizar por sus ingresos, los que les supondrá pagar una cuota exageradamente superior. Todo ello, faltaría más, junto con un incremento de la inspección fiscal, no vaya a ser que a algún autónomo se le ocurra huir de este infierno impositivo.
Disfruten con salud de lo votado.
De nuevo, el gobierno PSOE-Podemos, ese del “Es la cuarta vez que se lo contesto. Se lo voy a decir con mucha claridad: este gobierno no va a subir los impuestos a la clase media y a la clase trabajadora” (María Jesús Montero, dixit), va a volverlo hacer. Va a volver a faltar a su palabra, va a reincidir en su pantomima, va a volver a instalarse en la mentira.
La quiebra del actual sistema de pensiones es una realidad indiscutible. Sin embargo, nuestros gobernantes no quieren ni mentar la bicha y no hacen absolutamente nada para adaptar el modelo a la nueva realidad económica y social, más que mantener un interesado código de silencio sobre el particular. Eso sí, el gobierno con mayores ministros desde Suárez aprueba, años tras año, presupuestos a déficit manteniendo o incrementando gastos, transferencias y subvenciones insensatas en el actual contexto económico.
Siendo partícipes de esta incontinencia de gasto, se plantean ahora la aprobación de una subida histórica de impuestos a la clase media y trabajadora. Precisamente a ese colectivo que no ha encontrado otra alternativa laboral que el autoempleo y que sufre de las carencias del sistema como nadie. Después del Estado, es el principal agente empleador de España (casi 900.000 puestos de trabajo asalariado) pero no tienen cobertura de desempleo, reciben ingresos irregulares, responden personalmente de las deudas, soportan la mayor carga fiscal de Europa, tienen mayores dificultades de acceso a la financiación, trabajan como recaudadores de IVA para el Estado, … Pues ellos, han sido los elegidos para intentar paliar, en parte, el descomunal agujero que muestra el sistema español de pensiones. Un atraco histórico sin precedentes. Seguro que no por gusto, 90% de los autónomos se acogía a la base mensual mínima de cotización (294 euros). Pues el gobierno de los obreros españoles les obligará a partir de ahora a cotizar por sus ingresos, los que les supondrá pagar una cuota exageradamente superior. Todo ello, faltaría más, junto con un incremento de la inspección fiscal, no vaya a ser que a algún autónomo se le ocurra huir de este infierno impositivo.
Disfruten con salud de lo votado.
