No sé de que nos quejamos. ¡Qué manía de decir que tenemos muchos impuestos hoy y que... Seriedad, amigos. Los impuestos de hoy no son nada... ¡Que sí; que escribo en serio! Tomen nota de los impuestos que tuvimos alguna vez.
Vean: el 'fonsado' era la obligación de todos los súbditos a presentarse armados y equipados cuando el rey se iba a la guerra que fuese. El 'trabuco' era el nombre de lo que había que apoquinar por no tener armas y procedía de un cambio por 'tributo'.
La 'facendeira' era un día o más de trabajo gratis en casos extraordinarios.
El 'pecho' consistía en pagar cuatro sueldos cada vecino que vivía en tierras de realengo cuando el rei organizaba un ejército de guerra. De esto viene 'pecheros'.
La 'goiosa' la pagaban los vasallos cando tenían un hijo. También se llamaba 'gaudiosa'. (De gaudeamus, fiesta.)
La 'luctuosa' era lo que recibía su señor cuando le moría un vasallo. (Aún por encima: una vaca, una joya... Si el señor era caballero un caballo; si crego una mula.
'De mula o de vaso', lo que los abades pagaban a los merinos en la toma de posesión.
El 'xantar': los pueblos pagaban el mantenimiento del soberano cuando transitaba por ellos.
'Fumalgas' era el derecho del señor a heredar parte de la hacienda de los que morían sin hijos. A veces pagaban en cuartos.
'Caloña', era lo que pagaban en ciertas zonas en las que se cometía algún crimen, un rapto, un homicidio...)
'Terrazgo' o 'terraria': los frutos de una tierra nueva, a punto por primera vez, que se daban al señor.
'Foros', o 'dereituras' era contribución en forma de gallinas u otras aves.
La 'marrana' era el tributo de nn 'marrán' -un puerco, con perdón- que se pagaba en San Martiño de ahí que también se llamase 'martinenga' ou 'martiniega'. (¿Recuerdan aquello de 'a cada porco chégalle o seu San Martiño?¨) Así que: ¿de qué nos quejamos? (Mucho vicio es lo que tenemos, ¿no? ¡La M que los P!)
