Sindicatos subvencionados, caray. Llega el Gorecho con cara alegre porque dice que a lo mejor se hace sindicalista.
Caray
-dice don Venerando. ¿Y eso? Yo creí siempre que usted era un ciudadano equilibrado, que no se metía en asuntos nada claros o solo cuando llegaban las elecciones y usted botaba a los que representaban su forma de hacer, de querer y de ayudar, etc. O sea, que botaría usted limpiamente
don Gore
- Oiga, don Vene. ¿Es que un sindicalista no puede votar a los sindicalistas?
- Sí, sí
¿quién ha dicho que no
? A ver
- Es que parece prohibido ser sindicalista
- No, señor mío
no
Lo que quiero decir es que no se deberá ser dos veces.
- A ver, a ver. Explíquese un poco más.
- Con sumo gusto sindical. Y atienda, que no es tan fácil enterarse de ésta, que son grandes, de los sindicatos con mayúsculas y perras recibidas hasta de quienes no son sindicalistas, pero sí gastárselas
- Espere, espere, no me líe, - intervino don Gerttrudio-. Nos ía a todos ¿no señores
?
- Me explicaré mejor. Lo tengo aquí recortado de la prensa y leo: Los sindicalistas recibirán un total de 8,8 millones de euros de subenciones este año 2013, después del recorte que les haga del 20 por ciento previsto el Gobierno. Y que seguirá.
-¿Qué os parece? dice Gorecho. -¿Y por qué lo recogen los Sindicatos?
- Para sus gastos. Ese dinero lo repartirán en actividades propias si bien también abonando cuotas o premios a ciertas sindicales.
- Oiga- preguntó Don Pánfilo Pérez. - ¿Y por qué solamente a grupos señalados por los jerifaltes sindicales? Yo soy sindicalista del mar, navego en la pesca pero de esta ¡nunca la bordé, jo...!
- Porque sindicalistas somos casi todos pero actuamos en otros grupos que no están incluidos en este. Cada año las Centrales Sindicales - que no se sabe, o si, para que son- se llevan prácticamente la totalidad de estas ayudas. Y excuso deciros que son las poderosas CC OO y UGT. Por cierto, ¿cuántos sois aquí los sindicalistas?, aunque sea como estos. Aleluya...