Opinión

RECUERDO DE MÉNDEZ NÚÑEZ (1)

Es curioso, pero ya saben. Un hecho -que tampoco es necesario que sea fundamental- te obliga, a veces, a obedecer o a estar presente en alguna gestión que alguien ?amigo- cree que es precisa.


Y siempre hay quien ayuda a realizar o a poner en punto cercano lo que se suscita. Pongo como ejemplo esos avances que solemos realizar anunciando a los demás tal hecho importante, que deberíamos recordar, o un momento cercano y rememorativo de algún personaje histórico o de cierta calidad, que solemos anunciar para que quien lo precise no lo olvide y, así, lo citamos antes del tiempo justo de la conmemoración.


Hoy me toca a mí traer al momento histórico de la muerte de don Casto Méndez Núñez que a los inicios del mes de agosto de 1869, comenzó a notarse enfermo con una extraña dolencia, pues era algo de tipo impreciso, un quebrantamiento general, un gran cansancio sin que pudiera localizarse el mal.


A finales de julio, hace 144 años sentía dolores agudos en diferentes partes del cuerpo y, sobre todo, se acentuaba el estado de cansancio general.


A finales de agosto don Casto salió para Pontevedra, dirigiéndose antes a Lisboa y desde allí en el barco Colombo llegaría a Marín.


El comandante de dicho navío telegrafió al Almirantazgo comunicando que estaba mejor Méndez Núñez. y que recibió por ello un pláceme a lo que contestó Méndez Núñez, el 10 de agosto con un 'sigo bien' sencillo y un añadido de 'pero sin mejoría notable'.


Aún fue peor porque enseguida comenzó a tener vértigos, dolores agudos en diferentes partes del cuerpo y, sobre todo, se acentuaba el estado de cansancio general. (El médico doctor Gobián no diagnosticaba la enfermedad.)


Empeoró rápidamente don Casto Méndez Núñez y el 21 de agosto de 1869 rindió cristianamente su alma a Dios.


A la gente normal le pareció muy misteriosa aquella muerte y muy prematura. Dice el historiador don Carlos Ibáñez de Ibero, que era debida a manos criminales. y así lo entendió gran parte del pueblo español..


De esto seguiremos hablando con la idea de que los vigueses tienen dedicado a su memoria una calle y un monumento en la Alameda y, seguro, que gustarán de estos datos que se ofrecen por la verdadera cuestión para el recuerdo de don Casto.


Te puede interesar