Opinión

SOBRE EL CASCO VELLO

Mi buen amigo Luis H. P. no quiere que salga su nombre en nada que escriba yo. (Y me aclara que no es por mi mal hacer, sino porque no quiere darme la lata.)


Yo lo respeto y a pesar de decirle que es un encanto contarle hechos y cosas históricas de Vigo no pondré sus nombres enteros. Cada amigo con su tema, y lo que él desee saber de Vigo, ipso facto lo tiene, ¡faltaría más!, (si lo sé).


Me pregunta algo que parece sencillo, pero no es tanto. De modo que intentaremos enviarle todo lo que pida sobre el Vigo de la Edad Media, que, te aviso, LHP, dificilillo me lo pones. Posiblemente podría contarte alguna cosa más si te refirieses a la época romana, porque de estas fechas, y de antes, se guardan piezas, que hablan en los museos posibles y en trabajos de historiadores. Pero vayamos allá.


Si te digo que en la Edad Media, como tú quieres, te cuente cosas de Vigo, emepezaré por decirte que en esa época no existían complejos urbanos ni aún pequeños. Edificaciones solitarias sí, cierto.


Las regiones de A Guarda, Tui, Bayona, Salvaterra y hasta Redondela ya mantenían un cierto grupo característico, con vida, que aquí no llegamos a configurar.


Las creaciones literarias ?de poca consideración- de entonces, por su decir daban la sensación de la existencia de rúas, plazas, lugares: pero no. No hay calles: sí caminos difíciles, quebrados y ya, efectivamente, amigo Luis, en torno a la iglesia de Santa María, sin rematar, se comienza a ver un esquema de plano con el carácter triangular típico de las villas marineras, cercanas a las costas como en la Guardia o Bayona, donde las villas o 'ciudades' (sin usar este nombre), crecían paralelas a la costa, produciendo ese grupillo (el supuesto o imaginario) triángulo que decimos.


Y también existían ya lugares de uso cotidiano, como se observa en loos cercanas de la iglesia ?el casco vello- y pronto 'a Pedra' como más tarde las piedras del antiguo castillo del Penso que fueron donadas para casas en el atrio de Santa María (la antigua). Y seguiremos un poco más, de esto, amigo Luis. Pronto.


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