Opinión

Vigo y su potente industria

No voy a descubrir nada si digo que Vigo es una potencia en automoción y pesca, pero conviene colocar las cosas en su sitio y poner algunos números concretos para dejar las cosas claras sobre lo que significa. 

En lo primero, con Stellantis y la red de empresas que fabrican componentes y piezas, con una producción en máximos visible en Bouzas: el pasado mes de enero fue la terminal número 1 de España en carga y descarga de vehículos, superando a Barcelona o Valencia, dos ciudades con enorme peso industrial en la fabricación de automóviles. A ello ayuda que el puerto vigués dispone de líneas directas regulares y autopistas marítimas con África y Europa para mover piezas y coches. Sin la plataforma de Bouzas, obra tan criticada, atacada y cuestionada en el pasado nada de eso sería posible. 

En cuanto a la pesca, justo en estos momentos se encuentra la flota congeladora en Malvinas en plena campaña veraniega del calamar austral, de nuevo con buenas perspectivas de cara a volver a las cifras de años anteriores, entre 35.000 y 50.000 toneladas en cada una de las dos mareas. Suficiente para alimentar el mercado europeo: se estima que en torno al 25 por ciento del calamar que se consume en los países de la UE llega desde Vigo. La pesca industrial es clave y hay que cuidarla. Las diez primeras empresas por ventas y facturación a nivel nacional tienen su sede en Vigo, con Pescanova, Profand e Iberconsa a la cabeza y detrás Wofco, Mascato o Atunlo, entre otras.  Todas ellas han pasado y pasan por vicisitudes y cambios, pero en definitiva ahí siguen. Es el caso de Iberconsa, que ha crecido con fuerza con una flota de medio centenar de barcos y dos grandes factorías en Vigo, una en Teis y otra, la más moderna, en Bouzas. Nació en Vigo, pero la mayoría de su capital es ahora americano, un fondo propietario de la compañía, lo que supone alejar el centro de decisión si bien la gerencia se mantiene en la ciudad. Nueva Pescanova se encuentra en una situación similar, a la espera de que se concrete la venta con otra empresa canadiense. Y Fandicosta, a punto de pasar a Wofco, otro grupo nacido en Vigo. Atunlo atraviesa problemas más serios, con una guerra entre socios. Vigo será una ciudad industrial o no será.

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