El Banco de España nos adelanta de que la mitad de las actividades económicas de este país cerrarán el año en pérdidas. Y me pregunto, les quedará algo de dignidad a los "gobernantes" ¿que dicen representarnos políticamente en las instituciones al comprobar como su inutilidad de "gestión" está quebrando este país? Miren... les voy decir cual es la realidad de las empresas en una España destrozada económicamente, sanitariamente y socialmente .
Y la realidad económica como mejor se refleja es argumentándola con datos y estos son los cristalinos datos empresariales del tejido productivo compuesto por pymes y microempresas, a octubre de este año en el conjunto de nuestro país, España. Empiezo, al 86% de las actividades económicas, -de todo tamaño, número de empleados, y sectores-, la crisis les está afectando a su actividad, negativa o muy negativamente, y más del 52% de las empresas cree que va estar en riesgo su supervivencia como actividad económica, primer dato demoledor. Seguimos, para el 92% de las empresas, la situación económica actual es mala o muy mala, y para el 64% las expectativas para los próximos 12 meses son negativas, y este deterioro económico se refleja también, lógicamente, en las cuentas de resultados.
Así, para más del 90% de las empresas, su volumen de ingresos ha descendido debido a la pandemia. Lo ha hecho más de un 50% para el 39’35% de las empresas, y el 100% para el 3’6% de las empresas. El principal motivo de este descenso ha sido la falta de demanda, según el 74% de las pymes, seguido por el cierre o la reducción de la actividad por obligación legal para el 42%.
Y seguimos con más datos, para que todos tengamos una visión nítida de cuál es la realidad real económica de este país, y no la ficticia y virtual, que predica el gobierno bipartito. Y estos datos nos dicen que las empresas han intentado hacer frente a esta situación con diversas medidas de manera simultánea: ERTE (43% ), teletrabajo (38%); y también la reducción de la actividad, la reducción o distribución de la jornada; la reestructuración operativa, la refinanciación de la deuda, la moratoria de obligaciones fiscales, o el despido de parte de la plantilla. Concretamente, el 50% de las empresas han realizado ya una reestructuración de plantilla, y un tercio de éstas ha disminuido su plantilla en más de un 50%. El 4,5% prevé o ya ha realizado el cierre definitivo de su empresas, mientras que el 2,6% prevé o ya ha declarado concurso por insolvencia y otros 2,6% ha decidido vender o traspasar su negocio. Por último, las empresas que han optado por un ERTE, el 53% cree que no podrá mantener el empleo en los próximos seis meses. El mismo porcentaje cree que su plantilla disminuirá en los próximos meses, el 48% cree que esta reducción afectará a menos de la cuarta parte de la plantilla y para el 24% la reducción será entre el 25% y el 50% del empleo.
Pues bien, con este "sombrío" panorama económico y social que está sufriendo España, que es lo que piden las empresas, únicas generadoras de empleo? Pues líneas de actuación y planes de choque a corto plazo, tan básicos como una reducción temporal de las cotizaciones a la Seguridad Social, la reducción temporal de impuestos, y ayudas económicas directas a las pymes en los sectores más afectados.
Es tan difícil de entender? Pues parece que para la cohorte de ministros y ministras de este país, -con sus respectivas decenas de coches oficiales y miles de asesores pagados en su mayoría por los impuestos con los que gravan a las actividades económicas-, sí, lo es. Por lo que acuérdense de este artículo de opinión en este último trimestre de este año, cuando conozcamos los datos del paro de noviembre y diciembre, y ya no les cuento los del primer cuatrimestre del venidero año. Como mínimo, les servirá para extraer sus propias conclusiones.
Pero, que gran país el nuestro, que nos vamos al garete con esta tropa de vividores al mando, ¡y ni aun así espabilamos!
