Cartas al director

La decencia del sanchismo

 A nadie le cabe la menor duda de que los valores y principios del PSOE de siempre, son completamente distintos del sanchismo de nuestro actual presidente, ofuscado por tener el poder  a costa de “lo que sea”; vende España a precio de saldo para conseguirlo. Y los “postores” son filoterroristas, independentistas, golpistas y ultracomunistas, sin olvidar a los fugados de la justicia, cual estéril delincuente. Con este batiburrillo de políticos es con los que mejor se entiende Sánchez, sin duda por compartir su ideología con ellos, y por practicar el transfuguismo que deriva a esos traidores a nuestra Patria. Su resultado electoral ha sido un rotundo fracaso, tanto en las elecciones locales y regionales, como en las generales. Pero él pacta hasta con el diablo, vendiendo a quien haga falta, con el objetivo de mantener el poder.
Y después de todo esto, Sánchez sigue con el ocultismo de su cesión a Marruecos con el asunto del Sahara, algo altamente sospechoso para el pueblo. Continúa con sus leyes ideológicas tan perniciosas para todos, como la “ley del sí es sí”; la “ley trans” que tanto daño, mentiras y mutilaciones irreversibles provoca a los jóvenes y niños; “la eutanasia”, ‘para legalizar el suicidio; la obstinación con el asesinato de niños no nacidos o aborto, obligando a las conciencias honestas a realizarlo y castigando a quienes mediante el rezo, pretendan salvar alguna vida; la “ley de educación”, altamente ideológica; también el pronunciamiento de alguna ministra,  manifestando que los niños tienen derecho a practicar sexo con quienes quieran; y aún sigue en activo esta pérfida ministra. Cierto que en el cuadro de Ministros no hay uno solo con la dignidad suficiente para decir “basta ya de atropellos al pueblo español” y se marche, como tampoco los hay entre los diputados del PSOE en el Parlamente capaz de decir “no puedo apoyar más actitudes abyectas de mi partido” y cambie su afiliación. Pues el “totalitario” que les obliga a seguirle, es la persona más indecente que se puede encontrar en el mundo de la política.