El Consorcio implementó un nuevo proyecto de iluminación exterior que potencia la horizontalidad del edificio y realza los paramentos verticales de la fachada del inmueble
Las luces no solo sirven para vestir de espíritu navideño a la ciudad, también para realzar los detalles de la arquitectura más señalada de Vigo. Ejemplo de ello es el proyecto llevado a cabo en el edificio de Areal 46, la nueva sede del Consorcio de la Zona Franca de Vigo, implementando iluminación exterior en todas sus fachadas, un innovador sistema que consigue destacar la monumentalidad de un edificio histórico de la ciudad. Además, este juego de luces permitirá al Consorcio sumarse también a los distintos días internacionales y celebraciones con su apoyo mediante juegos de iluminación y colores.
En las fachadas se ha optado por un sistema de iluminación localizado, que permite potenciar la horizontalidad del edificio y realzar los paramentos verticales, con el objetivo de destacar todo el conjunto. Con este sistema se puede iluminar cada fachada del edificio de un color e incluso cuenta con un software que permite combinar colores y movimientos de luz gracias a la instalación de total de 20.624 leds.
Para la iluminación se ha contado con el fabricante español Grupo MCI, que ha realizado instalaciones en 128 países, según destacan desde Zona Franca. Entre sus trabajos más emblemáticos se encuentran el edificio de oficinas “Amandolier Building” de Ginebra, el innovador edificio “The Smile” en Londres, el Teatro de la ópera de Maracay en Venezuela, el Teatro Apolo de Almería, el Palacio de Abu Dabi (UAE), el Edificio de la Mutua Madrileña en Madrid, el Museo de astronomía de La Meca, el Mount Elizabeth Novena Hospital en Singapur, las Murallas Reales de Ceuta, la Galería Polnocna en Varsovia, el Convento de Santa Rosa de Viterbo en Santiago de Querétaro (México), además de numerosos hoteles repartidos por todo el mundo.
El delegado del Estado de Zona Franca, David Regades, recordó que “la nueva sede supone concretar la apuesta de Zona Franca por acercarse a la ciudad y que el Consorcio esté más próximo a los ciudadanos, de ahí que queramos apoyar iniciativas ciudadanas también con la iluminación”. La nueva sede del Consorcio, que consta de 140 metros cuadrados en total, está justo frente a la primera nave que Zona Franca tuvo en esa zona del Puerto cuando nació hace 75 años. El traslado del personal y los servicios desde las instalaciones de Bouzas comenzó a finales de noviembre, con la inauguración prevista para enero, programándose en los meses siguientes visitas para que la ciudad pueda conocer la reforma del histórico edificio.
Zona Franca ya anunció que ofrecerá toda la planta baja de este histórico edificio de Areal a la ciudad para que se puedan organizar desde reuniones a cursos con las facilidades que da encontrarse en pleno centro. Varias salas de diferentes tamaños, aulas y el propio auditorio, de 140 metros cuadrados, configuran la oferta abierta a la ciudad para la que se establecerá en su momento un sistema para la reserva de espacios.
