Con el Real Decreto en la mano, los talleres mecánicos podrían continuar abiertos pero finalmente han decidido bajar la persiana y echar el cierre por una acumulación de motivos que se resumen en un argumento de peso: no hay clientes. A consecuencia, las inspecciones técnicas (ITV) también han decidido suspender "sine die" las evaluaciones de los vehículos, como ya comunica el centro de Peinador, sin fecha de reapertura. Por tanto, los coches que tienen que pasar por el trámite tendrán que esperar otro momento y mientras tanto no correrían los plazos, como en otros trámites.
En Cahersa, que funciona en el entorno de la calle Venezuela, Jorge cerró esta semana la puerta "hasta nueva orden, porque no hay clientela y porque también estamos con problemas, hay que ser responsables". El viernes pasado todavía las ITV estaban abiertas, o al menos daban cita para la inspección, lo que resultaba "incompatible con el cierre de los talleres", señalaba. Explicaba que los negocios de reparación de vehículos debían tener coherencia sanitaria "y no hay clientela. Se anularon citas y eso va a pasarle a todos los talleres", como en efecto así fue.
Idéntica opinión compartía Manuel Martínez, en talleres Cunqueiro, que el miércoles reconocía que estaba "parados totalmente". "Desde el lunes estamos abiertos pero no viene gente, sólo estamos con lo que teníamos pendientes, lo estamos terminando y así se termine vamos a cerrar", anunciaba, "porque no queda más remedio". "Las ayudas a los autónomos no llegan, así que para qué queremos estar abiertos, si sólo es para consumir corriente", advertía. En otros talles, que no quisieron fotos pero sí opinar, señalaban lo mismo y también apuntaban otro extremo: que no llegaban piezas por problemas en la logística, lo que impedía en algunos casos finalizar reparaciones previstas.
Cetraa y Conepa, las organizaciones empresariales del sector del mantenimiento y la reparación de vehículos, anunciaron ayer que acaban de dirigir a las autoridades con responsabilidad en materia laboral del Estado y las comunidades autónomas la petición de aprobar con carácter de urgencia expedientes de regulación temporal de empleo en los talleres. Dichos ERTE se basan en la falta de trabajo en el estado de alarma y una paralización masiva de afluencia de vehículos a sus instalaciones. Ambas entidades consideran la medida imprescindible para garantizar la supervivencia de las empresas y el mantenimiento de los puestos de trabajo.
