Declamar y dejarse oír aunque sea con la boca tapada, una vez más el festival surgido en Vigo cumplió con su convocatoria y celebró su edición mexicana con tres días de versos a través de las redes
“Fue un aliento de energía y esperanza para todos los que nos dedicamos a la Cultura, dando además ejemplo porque todos los poetas, sin excepción recitaron con la mascarilla”. Marcos de la Fuente, co-director del festival Kerouac, valoró así la edición mexicana que este fin de semana celebró su tercer año en el país azteca.
“La sensación que deja el festival es buena; me parece un éxito organizar ahora mismo cualquier tipo de evento físico”. Con tres actos en la programación, la despedida fue el único presencial en La Mano, “ver a los poetas juntarse en las jardines de Coyoacán pese a todo y sacar adelante el evento, fue emocionante e inspirador”, apunta el director en declaraciones a Atlántico. Se dieron cita Klaus Sour, David Rojas, Carlos Kobra, Gabino, Adriana Camacho, Lucía Hinojosa, Jessica Rodarte y Zazil Collins con distintas escenificaciones poéticas que fueron compartidas online.
Las restricciones de movilidad obligaron al vigués De la Fuente, a participar desde Nueva York a través de las redes sociales. Se utilizó la fórmula híbrida, ya experimentada con éxito este otoño en la décima edición del Kerouac de Vigo. Pese a contar con colaboradores locales muy activos, reconoce que la coordinación de horarios fue complicado, aunque inevitable, “hay que adaptarse a esta nueva realidad global de las redes y las pantallas, tiene como ventaja poder llegar hasta gente de todo el mundo de forma inmediata”, afirmó. El festival conectó a dieciocho poetas de tres países diferentes: Estados Unidos, Galicia y México.
“El acto más seguido fue el encuentro entre Chus Pato (desde Galicia) y Rocío Cerón (desde México), excelsas y muy representantivas poetas de las dos culturas que estábamos conectando”. Para De la Fuente, la propuesta incluida en el programa Bifrontes, contó con la colaboración de Fabián Ávila Elizalde. “Son dos artistas potentes y contemporáneas que se profesan mutua admiración y eso se notó en el evento”.
De todos los momentos compartidos, Marcos de la Fuente escoge el recorrido virtual que hicieron el sábado por los distintos estados de México. Participó el propio de La Fuente con Hubert Matiúwaa, Balam Rodrigo, Karloz Atl o Ángel Sulub. “Fue muy emotivo escuchar a los poetas indígenas en su lengua; escriben como acto de denuncia, de resistencia política para que su cultura y su pueblo sobreviva y no desaparezca; es tremenda la responsabilidad que tienen y es muy necesario darlos a conocer”, afirma el director del festival.
La próxima entrega del Kerouac es en primavera Nueva York. Será la sexta edición, la de 2020 no se pudo celebrar por el coronavirus. Todo parece indicar que volvará a ser en versión híbrida, virtual y presencial.
“La sensación que deja el festival es buena; me parece un éxito organizar ahora mismo cualquier tipo de evento físico”. Con tres actos en la programación, la despedida fue el único presencial en La Mano, “ver a los poetas juntarse en las jardines de Coyoacán pese a todo y sacar adelante el evento, fue emocionante e inspirador”, apunta el director en declaraciones a Atlántico. Se dieron cita Klaus Sour, David Rojas, Carlos Kobra, Gabino, Adriana Camacho, Lucía Hinojosa, Jessica Rodarte y Zazil Collins con distintas escenificaciones poéticas que fueron compartidas online.
Las restricciones de movilidad obligaron al vigués De la Fuente, a participar desde Nueva York a través de las redes sociales. Se utilizó la fórmula híbrida, ya experimentada con éxito este otoño en la décima edición del Kerouac de Vigo. Pese a contar con colaboradores locales muy activos, reconoce que la coordinación de horarios fue complicado, aunque inevitable, “hay que adaptarse a esta nueva realidad global de las redes y las pantallas, tiene como ventaja poder llegar hasta gente de todo el mundo de forma inmediata”, afirmó. El festival conectó a dieciocho poetas de tres países diferentes: Estados Unidos, Galicia y México.
“El acto más seguido fue el encuentro entre Chus Pato (desde Galicia) y Rocío Cerón (desde México), excelsas y muy representantivas poetas de las dos culturas que estábamos conectando”. Para De la Fuente, la propuesta incluida en el programa Bifrontes, contó con la colaboración de Fabián Ávila Elizalde. “Son dos artistas potentes y contemporáneas que se profesan mutua admiración y eso se notó en el evento”.
De todos los momentos compartidos, Marcos de la Fuente escoge el recorrido virtual que hicieron el sábado por los distintos estados de México. Participó el propio de La Fuente con Hubert Matiúwaa, Balam Rodrigo, Karloz Atl o Ángel Sulub. “Fue muy emotivo escuchar a los poetas indígenas en su lengua; escriben como acto de denuncia, de resistencia política para que su cultura y su pueblo sobreviva y no desaparezca; es tremenda la responsabilidad que tienen y es muy necesario darlos a conocer”, afirma el director del festival.
La próxima entrega del Kerouac es en primavera Nueva York. Será la sexta edición, la de 2020 no se pudo celebrar por el coronavirus. Todo parece indicar que volvará a ser en versión híbrida, virtual y presencial.
