Noviembre finaliza hoy convertido en el mes más seco del siglo y con enorme diferencia. La media de precipitaciones del penúltimo del año se sitúa, a tenor de los datos de Meteogalicia, en torno a 150 litros. Y en este noviembre de 2021 apenas se han recogido 33, un 20 por ciento de lo normal, a la espera de que hoy pueda haber algún chubasco, que no se espera.
Es una cifra muy reducida, y más si se echa un vistazo a años anteriores. Incluso 2017, el de la mayor sequía del siglo que a punto estuvo de restringir el consumo de agua, hubo más lluvias, con 85 litros en aquella ocasión. En 2019 llegaron a 305,6, el doble de un mes normal.
Y en 2020 fueron 93, por debajo, pero el triple que en 2021. No solo en Vigo: también en Fornelos se ha notado la sequedad de este peculiar noviembre. El ayuntamiento vecino, donde se encuentra la presa de Eiras, que abastece al área metropolitana, también ha pasado un mes extraño, con solo 56 litros recogidos para una zona que es probablemente la más húmeda de Galicia y entre las dos o tres de mayor pluviosidad de toda España.
Pese a todo, no hay problemas de suministro a la vista: Eiras se encuentra al 78 por ciento de su capacidad, así que habrá agua durante los tres próximos meses, hasta la primavera. Zamáns, que es diez veces más pequeño, se encuentra al 50 por ciento de su capacidad, estabilizado desde hace quince días.
Las expectativas para los próximos días son muy distintas y si se cumplen las previsiones, todo el puente de la Constitución estaría pasado por agua, en un diciembre que se espera normal, lo que supondría en torno a 150 litros. Meteogalicia anuncia lluvias desde el miércoles en adelante, al menos hasta el día 7, tras el largo festivo.
