La venta municipal permite impulsar la urbanización y la compra para Ciudad de Justicia
La inmobiliaria Unión Hotelera Gallega SA se hizo con la titularidad de la finca municipal de Rosalía de Castro-2, en la esquina entre dicha calle y Miragaia por 1.096.935 euros más IVA tras conseguir el visto bueno de la mesa de contratación y la Gerencia de Urbanismo a su oferta. Se trata de una operación que tendrá dos consecuencias directas: por un lado, es una cifra muy importante que ingresará el ayuntamiento y que permitirá adquirir los terrenos que faltan para que la Xunta pueda desarrollar la Ciudad de la Justicia en torno a la calle Lalín. Y por otro lado, permitirá darle un impulso a la urbanización Rosalía-2, cuyo desarrollo coincidió con la crisis del"ladrillo", lo que ha condicionado su ejecución hasta el punto de que sólo se han construido dos edificios, ninguno de ellos ocupado en su totalidad. En cuanto al resto de parcelas del mismo ámbito, hay otra propiedad de la Sareb (el "banco malo") que trató de poner en marcha Novagalicia (ahora Abanca) con una cooperativa financiada por la entidad, sin éxito en la primera intentona pese a que en su día se consideró la mejor de Vigo por su situación y posibilidades urbanísticas. Hoy en día se ha convertido en un humedal donde crían los patos.
El proceso de venta de la parcela municipal 156 de Rosalía de Castro se puso en marcha en noviembre dentro de un programa más amplio por el que el ayuntamiento sacó a puja varias parcelas municipales más en la ciudad.
El terreno en cuestión es un espacio de 329 metros cuadrados, situado entre las calles Areal, Serafín Avendaño, Rosalía de Castro y Miragaia, y tiene una edificabilidad aproximada de 3.300 metros cuadrados para poner en el mercado un máximo de 29 viviendas. En la anterior ocasión, la Gerencia de Urbanismo, en sesión de 17 de febrero de 2011, declaró desierta a la subasta toda vez que durante el plazo de licitación no se presentó ninguna propuesta, pero en esta ocasión lo hizo la firma que gestiona un hotel, el Gelmírez de Santiago, pero que como explicaron en la capital gallega, pese a su nombre "es una promotora normal", que a partir de ahora podrá poner en marcha su proyecto residencial. n
