El inmueble situado en el número 5 de la Plaza Peñasco, en pleno corazón del Casco Vello, será derruido en la jornada de hoy. Así lo reconoce María Alonso, una de sus propietarias, tras ser notificársele el derribo de esta vivienda de dos alturas. Por su parte, el Concello procedió ayer al desalojo de los vecinos por el peligro de derrumbe de esta vivienda.
María y sus hermanos apuntan a las obras para construir el nuevo albergue de peregrinos –en la finca colindante– como la principal causa para que parte de la edificación cayese durante los últimos días. “En la noche del jueves al viernes se cayó parte de una habitación, el salón y el balcón del piso superior. Hoy se cayó otra parte y nos avisaron del Concello de que van a tirar la casa en menos de 24 horas”, explicaba ayer la propietaria.
Su familia no vive en este inmueble desde el año 2015 e indica que desde que se iniciase el proyecto de obra para el nuevo albergue, comenzaron los problemas: “Tras demoler las viviendas, otra empresa se encarga de levantar el albergue. Esa constructora pensaba que la casa no tenía dueño y, gracias a una vecina, se pusieron en contacto con nosotros a principios de mes para asegurarnos que corrían con los posibles desperfectos. Ahora nadie nos comunica nada, solo que van a tirar la casa y que se encuentra en el aire”, reconocía María Alonso. “El viernes no dijeron que estaba para demoler al completo y creo que todo es por las obras”, añadió.
El Concello señaló ayer a través de un comunicado que los vecinos de la zona habían sido realojados en el Hotel Bahía por “el peligro de derrumbe” y que “técnicos municipales detectaron en varias inspecciones llevadas a cabo en los últimos días problemas de estabilidad” , destacando que se trata de una “casa vacía y en ruinas que presenta grietas en la fachada”. Sus propietarios negaron que la casa se encontrasen en estado ruinoso y remarcaron que desde el Concello se les indicó que “el martes, una vez lleguen los operarios de la obra, se comenzará a demoler lo poco que queda de la casa”. Desde la concejalía de Urbanismo indicaron que “se dio inicio a los trabajos para solucionar los problemas de estabilidad en el inmueble”, mientras los vecinos más próximos a esta edificación eran trasladados en la tarde de ayer hasta el Hotel Bahía. “No nos dijeron que van a solucionar ningún problema, van a tirar la casa y desde el pasado viernes ya no nos dejaron entrar a recoger nada de lo que quedaba en esa casa”, afirmó con rotundidad María Alonso.
Los dueños del inmueble señalaron que “en ningún momento” se encontraba dentro el plan de demolición para construir el albergue para peregrinos y lamentaron ‘‘la nula comunicación por todas las partes”. Cabe recordar, que la Plaza Peñasco es una zona protegida como conjunto histórico artístico al encontrarse en el Casco Vello de la ciudad. n
