Representantes de los pediatras de los centros de salud del área sanitaria viguesa alcanzaron ayer un acuerdo con el Sergas sobre la organización del trabajo en un momento en el que falta el 30% de los profesionales por distintas causas (vacantes, bajas y otras ausencias) y sobre todo ante la proximidad de las vacaciones estivales, donde la situación podría complicarse aún más.
Una decisión unilateral de la Dirección de Atención Primaria adoptada el 21 de abril sobre la forma de proceder en centros de salud sin pediatra había causado malestar en el colectivo, que no había sido consultado, y sirvió para abrir una negociación en la que ya se dieron algunos acuerdos.
Uno de los principales problemas era la forma de actuar con los menores que deben ser atendidos “en el día”, es decir en menos de siete horas, una vez que pasan el filtro del programa Xide. La norma inicial indicaba que la enfermera haría una primera valoración y que se comunicaría con el pediatra del centro de salud de referencia o, en caso de ausencia, con el pediatra del hospital para que decidiesen las medidas a adoptar. En la reunión se llegó a un consenso para este escenario. Estos niños deberán ser atendidos en las Urgencias Pediátricas del Cunqueiro o en el PAC de referencia. Esta decisión ya se había adoptado en el año 2019 (y sigue en vigor) para niños con cupo de mañana que pedían ser atendidos en horario de tarde y salvo que se tratase de una “atención inmediata” eran remitidos a Urgencias o al PAC. En el área sanitaria la “atención en el día” se puede realizar en estos dispositivos de urgencias porque están relativamente cerca, desde luego a menos de 7 horas que sería el topo máximo.
Asimismo, se abordó la norma para urgencias de “atención inmediata”, las que no pueden esperar, en esos centros de salud en los que no esté el pediatra. El colectivo considera que este escenario no necesitaría una norma, puesto que todos los facultativos llevan inherente a la profesión la atención a las personas que requieran una atención urgente en el propio centro, al margen del horario, el cupo o la circunstancia que sea.
Tampoco ven problema en la guía que elaboró la Dirección sobre la atención ordinaria, según la cual se daría cita al paciente en el primer hueco disponible con el profesional correspondiente.
Otra cuestión clave es la organización del trabajo en verano y ahí se dará autonomía a los profesionales para que hagan propuestas, desde concentrar horarios, la sustitución entre compañeros, entre otras medidas. La Dirección se reunirá con los pediatras dentro de 15 días para avanzar en este asunto.
“La sensación es buena, seguiremos en contacto y trabajando juntos codo con codo para dar asistencia en una situación tan difícil como la que estamos atravesando”, aseguraron los facultativos.
