Leo Messi es el nombre propio del Mundial de Qatar. El argentino logró la ansiada Copa del Mundo como líder indiscutible de su selección, dentro del campo, pero también fuera. El futbolista de Rosario se mostró más carismático que nunca, también ante los micrófonos, y dejó la frase del Mundial. Aquella que pronunció tras la eliminatoria ante Países Bajos: "Qué mirás, bobo".
Desde ese momento, la entonación de Messi ha recorrido el mundo entero, pero lo que muchos no saben es que la frase viral dirigida al jugador holandés Weghorst lleva siglos escrita en el Monasterio de Samos, en Lugo. Una piedra de dicho convento gallego guarda este 'secreto' desde hace 450 años.
Uno de los medallones del templo tiene un recado para los visitantes desde que fuera restaurado en el siglo XVI (después de que fuera arrasado por un incendio): "QUE MIRAS BOBO". Una sentencia que, por muchos años que hayan pasado, sigue teniendo el mismo significado que entonces. La autoría se le atribuye al cantero Pedro Rodrigues, natural de Monforte de Lemos. Con el mismo objetivo que Rodrigues, Messi empleó los mismos términos para silenciar a su adversario.
"QVE MIRAS BOBO"
Sabedes de onde saiu isto que teño na foto de perfil?
Vouvos falar dun troll do século XVI👇 pic.twitter.com/vYkXLFnR73— o Rubén (@otuiterdoRuben) November 21, 2019