Rafael Nadal cayó derrotado por 4-6, 7-6(10) y 7-5 en dos horas y 59 minutos frente al canadiense Milos Raonic, que se citó con Roger Federer –verdugo de Tomas Berdych– en las semifinales de Indian Wells, primer Masters 1000 de la temporada.
La derrota de Nadal es la primera que sufre frente a Raonic, al que dominaba hasta ahora por 5-0. También es su primera derrota ante un canadiense y en cuartos de final del desierto californiano, donde acumulaba ocho victorias.
Para el mallorquín era su segundo duelo de la temporada ante un 'top 10' y volvió a caer, igual que contra Berdych en Australia.
Raonic abrió el partido con una doble falta. Fue un indicio de lo que iba a ocurrir, ya que Nadal rompió a su rival, consolidó su servicio y obtuvo una ventaja de 3-1 que a la postre le sirvió para llevarse la primera manga.
El segundo set comenzó con otra doble falta del canadiense y un despliegue descomunal del mallorquín. Pero Raonic, que salvó dos puntos de 'break' en el quinto y en el noveno juego, se mantuvo firme y logró que reinara la igualdad hasta la la muerte súbita. Entonces llegó la primera doble falta de Nadal y, aunque el manacorense se puso con ventaja 5-4, Raonic salvó tres puntos de partido, se impuso en un 'tie-break' maratoniano y forzó el set decisivo.
El pulso fue titánico. El mazo de Raonic contra el de Nadal. Superadas las dos horas y media de partido, cuando cada sprint y cada punto costaban un mundo, seguían las tablas en el marcador. Ninguno lograba despegarse. La presión, principalmente sobre los hombros de Nadal, pesaba como una losa. Y en la recta final le faltó su mejor tenis. El mallorquín salvó un 'break' con 5-5, pero no el segundo. Ahí, Raonic mató el duelo.
Pese a la derrota, Nadal hizo un balance positivo de su paso por Indian Wells. "Me voy satisfecho de mí mismo y de cómo he competido. Llevaba mucho sin un partido así, casi desde Wimbledon del año pasado diría yo. Casi nueve meses sin competir en un partido de esta exigencia mental, tenística y física durante 3 horas. Ha sido la primera vez y lo he hecho bien", valoró el número tres del mundo.
