Galicia

La Xunta reclama inversiones en la planta lucense de Alcoa

El conselleiro de Economía, Francisco Conde, en el Parlamento.
photo_camera El conselleiro de Economía, Francisco Conde, en el Parlamento.
Exige al Gobierno central que apruebe cuanto antes el estatuto de consumidores electrointensivos

El conselleiro de Economía, Empleo e Industria, Francisco Conde, demandó ayer al Gobierno central inversiones específicas en la planta de Alcoa en San Cibrao (Lugo) y medidas para lograr un precio competitivo de la energía eléctrica que permitan que la multinacional dé marcha atrás a su plan para ejecutar cientos de despidos en la factoría.
Conde compareció ayer ante la Diputación Permanente del Parlamento de Galicia en una bronca sesión extraordinaria que se iniciaba con un encendido debate sobre la ausencia del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para dar cuentas sobre este tema en la Cámara autonómica.
Durante su intervención inicial, el conselleiro lamentaba que se han cumplido los “peores pronósticos” sobre el futuro de Alcoa en San Cibrao y ha culpado de ello a la inacción de un Gobierno central que –según ha manifestado- no ha adoptado medidas para establecer un marco eléctrico “estable y competitivo” que le permita a la factoría producir de manera competitiva respecto a países como Alemania o Francia.  Sin un cambio de actitud por parte del Estado, agregó, esta es la “antesala del fin de un sector que, paradójicamente, se considera como esencial en este estado de alarma”.

las alternativas
“Hay alternativas”, declaró ayer el responsable autonómico de Industria, que ha pedido que la puja de interrumpibilidad del segundo semestre del año sea “mucho más realista que la aprobada para este semestre” y que ha exigido al Gobierno central que apruebe cuanto antes el estatuto para los consumidores electrointensivos incluyendo las alegaciones presentadas por la Xunta.
Entre ellas están la supresión del impuesto a la generación eléctrica, la eliminación del céntimo verde sobre el carbón, la supresión de los peajes de acceso a la energía o la ampliación de las ayudas compensatorias para los costes de emisiones directas de dióxido de carbono hasta el máximo que permita la Unión Europea. “No estamos defendiendo lo indefendible”, dijo ayer Conde, que ha equiparado estas actuaciones a las de otros países europeos y que especuló con que la actual política energética del Gobierno “favorece sobre todo a Cataluña y al País Vasco” a costa de perjudicar a territorios como Galicia. Entre las medidas reclamadas por el Ejecutivo autonómico, están que se desvíe parte de los fondos comunitarios que reciba España para la reconstrucción tras el coronavirus a diseñar un “plan específico para modernizar e impulsar el conjunto de las empresas electrointensivas”.
El comité de Alcoa-San Cibrao instaba ayer  a la compañía a retirar las medidas anunciadas a la espera de la celebración de la mesa multilateral prevista para el próximo martes, en la que estarán representados tanto los trabajadores como la empresa, el Gobierno central y la Xunta. El presidente del comité de empresa, José Antonio Zan, lamentó la "falta de voluntad" de diálogo por parte de los representantes de la multinacional, que "no han querido entrar a valorar hasta donde quieren llegar" para lograr una solución.

Caballero destaca que el Gobierno autonómico "no tiene respuestas" 

Las fuerzas de la oposición en la Cámara autonómica han escenificado posiciones lejos del acuerdo, comenzando por el grupo mayoritario de la oposición, un PSdeG cuyo secretario xeral Gonzalo Caballero ha cargado contra la política industrial “insuficiente, ausente y negativa para el país” de la Xunta, a la que ha acusado de ser la responsable de la pérdida de empleos durante los últimos años.
Para Caballero, el actual gobierno gallego “no tiene respuestas” para la situación actual y se limita a cargar las responsabilidades sobre un Estado que –ha remarcado- este año destina 38 millones a la factoría.
Ana Pontón, portavoz nacional del BNG, calificaba de “tan previsible como inútil” la intervención del conselleiro y, al igual que el PSdeG, culpaba al Gobierno gallego de los “resultados dramáticos” del sector industrial y de esta última “bofetada” a los trabajadores de Alcoa. Pontón ha querido desmarcarse de lo que ha llamado “rifirrafe entre fuerzas estatales” e insistió en cambiar la “auténtica ruina” del actual marco energético con una tarifa eléctrica gallega, similar a la que existe en Euskadi, que permita producir con mayor competitividad a las empresas. También ha abogado por una intervención pública para garantizar el futuro del empleo, una medida compartida por el representante del Grupo Mixto en este debate, Davide Rodríguez.
El secretario xeral del PPdeG, Miguel Tellado, salía en defensa de la postura de la Xunta y calificaba de “sobreactuación electoral” las intervenciones de los portavoces de la oposición; además de acusar directamente al Gobierno central de atacar a la industria gallega “por tierra, mar y aire”.

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