Es la primera vez en su extensa carrera que vive algo con tanta sonoridad, pero José Juan Figueiras (Vigo, 1979) lleva con una mezcla perfecta de aplomo y alegría haber sido el héroe del Alcoyano en la eliminación del Real Madrid en la Copa. Este canterano celeste y celtista ve recompensado su amor por un deporte en el que sigue a los 41 años. Y sin fecha de caducidad.
¿Qué sensaciones tiene el día después?
Masticando aún todo lo que pasó. Aún estamos, al menos yo, en una nube, porque es difícil digerir lo que pasó ayer. Esto llevará días e incluso semanas para darnos cuenta de la que hemos liado ganando este partido y eliminando el Real Madrid.
Usted ya lleva tiempo en esto del fútbol, pero supongo que uno sueña con un partido así siempre.
Desde luego. Enfrentarte a un grande y que te salgan las cosas bien, como ayer me salieron a mí, es lo que uno sueña. Eliminas al Madrid y todo lo que se monta mediáticamente porque no dejas fuera a cualquier equipo, sino al mejor del mundo, campeón de Liga de Campeones, de Ligas... La verdad es que es muy ilusionante. Quiero disfrutar de este momento a tope, que pasa pocas veces en la vida.
¿Y uno se recrea en esas diez paradas?
No he tenido ni tiempo de mirarlas. Tengo muchísimos mensajes y quería contestar a todo el mundo... Hasta que pasan unos días, con más calma, observaré el partido y lo detallaré. Es para tener vídeos ahí bien guardados y enseñárselo a los nietos y a los hijos. Lo que pasó ayer en El Collao es pura magia del fútbol. Y no me quiero imaginar si llega a estar a reventar...
Es la pena, un logro así pero sin público en las gradas.
Desde luego. Además, Alcoy está pasando un momento muy crítico con el tema del Covid y para su gente va dedicada esta victoria. El apoyo nos llegaba desde sus casas. Incluso al lado del campo había gente en los balcones de los edificios apoyándonos y esos gritos nos empujaron a meter el segundo gol al Real Madrid.
¿Cuando recuerda el partido, se queda con alguna parada?
La de Lucas Vázquez, el cabezazo, y la de Asensio. También está la de Vinicius, que me hacen una cesión que se queda corta y decido salir para que no pueda encararme más atrás. Creo que tenía a Benzema solo para meterla al lado, pero decidió chutar y con el pie la saqué. Son décimas de segundo en las que tienes que elegir y en ese momento elegí bien.
En una posición como la de portero, estará acostumbrado a vivir en ese alambre de ser el héroe o el villano.
Son días que se dan bien y hay que vivirlos. Todo lo que se está viviendo a nivel mediático alrededor del equipo hoy es impresionante.
¿Desde Vigo le llegan mensajes?
Claro que sí. Me llegan de todos lados, hasta del extranjero. Es alucinante. No sé la gente cómo consigue los teléfonos (risas).
¿Y ya piensa en el siguiente rival en
la Copa?
Pensamos en el domingo, que tenemos un partido importante ante el Orihuela. Mañana veremos el sorteo a ver qué nos toca pero la Liga también es importante porque estamos en los puestos de ascenso a la nueva categoría y éste es un rival directo.
El sueño sería jugar y tratar de eliminar a otro grande.
Sí, pero ya se está viendo cómo está la Copa. Me gustaría que nos tocase el Barça pero aún tiene que jugar en Cornellá, un campo difícil para ellos, y puede pasar cualquier cosa.
¿Este logro se puede ver como un colofón a su carrera o le estamos retirando demasiado pronto?
Yo creo que sí me estáis retirando un poco pronto (risas). Aún me queda un año, a lo mejor aguanto dos... No me marco esa clase de objetivo, sólo el de ir todos los días a entrenar y hacerlo al máximo. Al final de temporada, si me encuentro física y mentalmente bien como hasta ahora y el Alcoy quiere que siga, por mí encantado. Intento disfrutar el día a día y más hoy. n
