La figura de Julia Vaquero (A Guarda, 1970) sigue levantando admiración en el mundo atlético gallego y español. No en vano, la guardesa es un referente indiscutible del fondo femenino, ostentando todavía, casi 18 años después de haberlo conseguido, el récord de España de 5.000 metros. Pero Julia no se acaba en el pasado. Es habitual verla en pruebas populares y federadas de atletismo, pero este año ha querido dar un paso más y, de la mano del Team Oiense Woman de Aser Estévez, se ha subido a la bicicleta. “Siento respeto, algo de temor, inquietud y mucha inexperiencia. Con ganas de aprender en cada competición y vivir la experiencia. Descubrir, aprender los entresijos de otro deporte ilusiona y motiva”, narra la polifacética protagonista.
El atletismo fue, precisamente, lo que la llevó al ciclismo. A finales de 2020, estaba preparando la maratón de Valencia y necesitaba ejercitarse sin dañar su pie derecho, “maltrecho al arrastrar secuelas de una lesión en mi época como atleta de élite”. Compró una simple mountain bike para andar por carretera pero le picó la curiosidad. “Los entrenos en bici me gustaban más porque disfrutaba y eran novedosos. Empecé a frecuentar tiendas de ciclismo y a sentirme atraída por las bicis de carretera. Me preguntaba si sería capaz de ir sobre una rueda tan fina, teniendo que controlar cambios, llevando los pies anclados... No es tan fácil, máxime cuando vas por carretera y tus cinco sentidos tienen que estar disponibles”, rememora.
Ya en marzo de 2021, llegó a la vida de Julia “Laranxiña”, su primera bicicleta de aluminio. “La primera vez que salí, girando en una rotonda, me caí”, recuerda. Gajes del oficio pero nada que detuviese a la Julia ciclista. En octubre de 2022, la familia creció con la llegada de “Olímpica”, ya de carbono. Un paso que presagiaba lo por venir, lo que ya ha llegado.
La calidad de los entrenamientos mejoró. Y la calidad innata de Julia salió a relucir. “Tengo la motivación que me proporciona Aser con sus comentarios, dado que con la poca experiencia y la edad que tengo, se me da bastante bien”, comenta. Todo con mucha seriedad y paso a paso. Hubo un duatlón de prueba y, sin que el entrenador lo supiese, la guardesa incluso se inscribió en el Gallego de larga distancia: “Menuda cura de humildad me dio la vida... Me retiraron, pues no tenía la suficiente preparación ténica ni física para estar en esa salida”.
Ahora, con el Team Oiense Woman, comenzará a tomar parte en el calendario gallego. “En ese pelotón hay mujeres con una dilatada experiencia que despiertan mi admiración, como Chus Barros. Se verá si soy competitiva o no a lo largo de la temporada. Por mi forma de ser, siempre me he entregado al máximo, soy exigente y disciplinada”, señala sobre el futuro inmediato. Y admite que está “temerosa, sobre todo en aquellos circuitos donde la técnica prevalezca sobre la condición físíca”. Se exigirá, como siempre. Ojalá también disfrute.
"Hay que entrenar el doble que en el atletismo"
Cuando se habla de Julia Vaquero, es inevitable mantener como referente el atletismo. Y la guardesa diserta sobre las diferencias con el ciclismo. “Pese a no ser tan lesivo, también es duro llevado al terreno competitivo. Y para conseguir los mismos objetivos metabólicos, en la bici debes entrenar multiplicando por dos el tiempo que empleas corriendo”, concreta Julia.
Además, apunta aspectos nuevos para ella. “Es menos peligroso correr cuando llueve que hacerlo en bici. También se pasa más frio en la bici. En mi proceso de adaptación, he tenido problemas de lumbares, glúteos, cuádriceps, inadaptación a la postura el sillín...”, enumera. Y no niega “los riesgos que supone cada entrenamiento por el tráfico, la inestabilidad de la bici y las posibles caídas”.
