El Conservas Orbe Rubensa Porriño aseguró matemáticamente su presencia la próxima temporada en la máxima división del balonmano femenino tras vencer ayer de manera clara al Morvedre por 36-25. Un partido vital para ambos conjuntos, donde una derrota de las porriñesas podría meter en apuros al equipo en las dos últimas jornadas de liga.
Comenzó el partido con un equipo local que quiso castigar los errores rivales desde el minuto uno. Con una defensa de 6:0, aprovechó la dificultad del Monvedre para crear ocasiones y contraatacar a través de la velocidad de la extremo Thais Fermo. Transcurridos diez minutos de partido, las locales ya abrieron una renta de tres puntos. Siguió apretando la defensa de las pupilas de Isma Martínez, con mucha agresividad y con una gran Fátima Ayelén en portería. En cuanto al ataque, Maider Barros desde el extremo derecho mostró su efectividad siendo una de las grandes protagonistas. Llegó el final de la primera parte y el Porriño se fue al descanso con el marcador a su favor (18-13).
Con el arranque de la segunda parte, se desataron los goles. A la solidez defensiva, se le sumó la efectividad de las jugadoras del Porriño para que, a quince minutos del final, aventajasen a su rival en nueve goles (26-17). El Morvedre bajó los brazos y asumió la derrota, que confirma a las porriñesas como equipo de la élite del balonmano femenino.
