La gallega Ana Peleteiro no tuvo problemas ayer para pasar la calificación en el triple salto del Campeonato del Mundo júnior, que se está disputando en Eugene (Estados Unidos), al clavar en su primer intento justo la marca solicitada para entrar directamente en la final: 13:30.
Con un viento de 0.7 a favor, la de Riveira consiguió su objetivo sin apenas gastar fuerzas y sin pasar por la presión de tener que lograrlo en sólo tres saltos.
Peleteiro fue una de las seis atletas que pasaron a la final tras superar los 13.30 metros solicitados. Y curiosamente, cinco de ellas, incluida la gallega, lo consiguieron en un salto intento. La mejor marca fue la de la francesa Rouguy Riallo (13.77, nuevo récord francés júnior), seguida por la cubana Liadagmis Povea (13.55), la estadounidense Keturah Orji (13.46), la china Xiaohong Li (13.38) y la propia Peleteiro con sus 13.30. La rumana Elena Panuroiu completó el sexteto con sus 13.38 en su segundo intento. En cualquier caso, todas las marcas están muy lejos de los 14 metros, barrera que de todas las participantes sólo ha superado en su vida la gallega, que será favorita a reeditar su título mundial en la final de la madrugada del sábado al domingo (00:30).
Peleteiro calificó el salto realizado de "muy normalito porque quería asegurar el primer intento para no cansarme pero estoy muy contenta". La gallega añadió que "en la final puede pasar de todo. Depende de cómo me encuentre ese día, de cómo esté el tiempo, de muchas cosas".
La otra española presente en la calificación de ayer, Cora Salas, quedó eliminada al no poder realizar ningún salto válido en sus tres intentos.
De la actuación española en la madrugada del miércoles al jueves, lo más destacado es el nuevo récord de España júnior de 110 metros vallas logrado por Francisco López, con una marca de 13.55. Este tiempo le permitió clasificarse para la final, que corrió la pasada madrugada.n
