Un coche que se dio a la fuga arrolló a la jugadora de la UD Mos mientras conducía su moto
La temporada de Mayra Martínez (Buenos Aires, 1994) ha finalizado antes siquiera de poder comenzar. El último fichaje de la UD Mos, procedente del Sárdoma, fue embestida por detrás por un coche mientras conducía su moto el pasado jueves. Fue a la altura del Instituto de Os Rosales, en el barrio de Teis. Mayra frenó al llegar al badén de un paso de cebra y en ese instante sufrió el impacto que le llevó al suelo y le produjo una fractura de tibia y peroné en su pierna izquierda. El conductor se dio a la fuga.
"Me arrasó y siguió de largo", destaca la lateral argentina, que debido a la angustia del momento, solo recuerda que el coche era blanco, aunque algunos testigos afirman que era un vehículo familar de la marca 'Opel'.
Mayra está desde entonces hospitalizada en el Sanatorio Concheiro, donde será intervenida el martes de su lesión. "Me duele con cualquier movimiento", confiesa con timidez al otro lado de la línea telefónica. Pero el dolor anímico y la frustación se palpan mientras avanza la conversación, aunque la futbolista del Mos se esfuerza en quitarle importancia. "Ahora ya pasó", insiste. "Pero me dio mucha rabia en el momento que no se frenase ni se preocupase de nada", expresa la jugadora bonaerense, que vuelve a una línea de optimismo mezclada con resignación. "Son cosas que pasan. Hay de todo en la vida", destaca con un suspiro.
El percance ha frustrado un debut de amarillo que tendrá que esperar. La idea de Mayra tras dejar Sárdoma era pasarse al fútbol sala. Pero ante la impresión de que no habrá competición debido a la pandemia, decidió fichar por la UD Mos la semana pasada. Aunque entrenó, no jugó frente al Valladares. Con el parón de este fin de semana, apuntaba a estrenarse contra la Arousana. No podrá ser. "Estaban muy contentos conmigo y yo con ellos. Pero ahora nada", lamenta Mayra, que no sabe cuánto tiempo estará de baja. Tampoco le importa. "Ni se lo pregunté al doctor", reconoce. Pero el corto formato de la liga y los meses que tiene por delante hacen muy complicada su reaparición esta temporada. Pero eso es lo de menos. Si todo va bien, se irá a casa 24 horas después de la operación. Y ahí empezará la rehabilitación para poder volver a jugar. Para poder dejar atrás este desagradable episodio. Para volver a vivir. n
"Me arrasó y siguió de largo", destaca la lateral argentina, que debido a la angustia del momento, solo recuerda que el coche era blanco, aunque algunos testigos afirman que era un vehículo familar de la marca 'Opel'.
Mayra está desde entonces hospitalizada en el Sanatorio Concheiro, donde será intervenida el martes de su lesión. "Me duele con cualquier movimiento", confiesa con timidez al otro lado de la línea telefónica. Pero el dolor anímico y la frustación se palpan mientras avanza la conversación, aunque la futbolista del Mos se esfuerza en quitarle importancia. "Ahora ya pasó", insiste. "Pero me dio mucha rabia en el momento que no se frenase ni se preocupase de nada", expresa la jugadora bonaerense, que vuelve a una línea de optimismo mezclada con resignación. "Son cosas que pasan. Hay de todo en la vida", destaca con un suspiro.
El percance ha frustrado un debut de amarillo que tendrá que esperar. La idea de Mayra tras dejar Sárdoma era pasarse al fútbol sala. Pero ante la impresión de que no habrá competición debido a la pandemia, decidió fichar por la UD Mos la semana pasada. Aunque entrenó, no jugó frente al Valladares. Con el parón de este fin de semana, apuntaba a estrenarse contra la Arousana. No podrá ser. "Estaban muy contentos conmigo y yo con ellos. Pero ahora nada", lamenta Mayra, que no sabe cuánto tiempo estará de baja. Tampoco le importa. "Ni se lo pregunté al doctor", reconoce. Pero el corto formato de la liga y los meses que tiene por delante hacen muy complicada su reaparición esta temporada. Pero eso es lo de menos. Si todo va bien, se irá a casa 24 horas después de la operación. Y ahí empezará la rehabilitación para poder volver a jugar. Para poder dejar atrás este desagradable episodio. Para volver a vivir. n
