El mismo once, con Araujo
Eduardo Coudet repitió prácticamente el mismo once que perdió en Sevilla en la jornada anterior, con el único cambio de la entrada de Néstor Araujo por Aidoo. El ghanés, que no pudo terminar el choque del Sánchez Pizjuán por un problema muscular, se recuperó a tiempo y entró en la convocatoria, pero el técnico prefirió no forzar. El resto del equipo inicial fue idéntico, un 4-4-2 con Denis Suárez por delante de Tapia, Brais Méndez por la derecha y Nolito por la izquierda, y con Iago Aspas y Santi Mina en punta, aunque el moañés se movió por todo el ataque celeste.
Presión alta y posesión
El Celta intentó trasladar al terreno de juego desde el principio la idea de su entrenador: posesión y presión tras pérdida en campo rival. El plan funcionó casi toda la primera parte y el equipo celeste fue acumulando ocasiones de gol, pero a Santi Mina, Nolito y Hugo Mallo les faltó puntería o se encontraron con el portero del Granada, Rui Silva, que hizo cuatro paradas en los primeros veinte minutos.
Contraataque del Granada
El Granada, fiel también a su estilo, se plantó en su propio campo a la espera de un error de los celestes que acabó produciéndose en el minuto 24. Denis Suárez perdió la pelota, Luis Milla envió un pase en profundidad para Luis Suárez y el delantero visitante se deshizo primero de Tapia y picó después la pelota ante la salida de Rubén para poner el 0-1 en el marcador.
Determinante Aspas
El Celta reaccionó rápidamente al gol gracias en buena parte al talento de Iago Aspas, que se movió por todo el frente del ataque, desde el centro del campo hasta el área rival, y generó muchos problemas a la defensa visitante. En el minuto 26, participó en la acción que terminó en el centro de Olaza y el gol del empate de Nolito. Ya en la segunda parte, de sus botas nacieron los dos tantos que dieron la vuelta al marcador, obra de Baeza y Fran Beltrán.
Cambios goleadores
En la segunda mitad, el Celta mantuvo el dominio de la pelota, aunque el cansancio empezaba a notarse y la velocidad ya no era la misma. Aun así, Coudet esperó al minuto 74 para hacer los primeros cambios. Okay y Baeza entraron por Denis Suárez y Nolito y, en el 83, Fran Beltrán sustituyó a Santi Mina. Baeza y Beltrán acabaron siendo determinantes al firmar los goles con los que el equipo celeste tumbó al Granada en cuatro minutos, entre el 80 y el 84. En apenas dos partidos, Eduardo Coudet le ha dado una imagen completamente diferente al Celta. De la timidez defensiva de las últimas campañas a la valentía ofensiva. Que siga así. n
