El internacional chileno, que no entraba en los planes del Celta, rescindió su contrato en Vigo
Marcelo Díaz ya no es jugador del Celta. Tal y como habían hablado las dos partes a principio del presente verano, el Celta y el internacional chileno han llegado a un acuerdo para rescindir el contrato que los unía hasta junio de 2019 y el futbolista voló ya ayer a México para firmar por el Pumas. Se pone así fin a la estancia en Vigo de un futbolista que llegó para suplir la traumática salida de Augusto Fernández hace dos mercados de invierno y que no ha podido alcanzar un rendimiento óptimo vestido de celeste, en buena medida por las lesiones.
Díaz no entrenó ayer con el resto de sus compañeros, de los que ya se había despedido, en la mañana de ayer. De esta manera se certificó una salida que el Celta y el propio jugador hicieron oficial a mediodía. Se cerraba así una complicada situación para el jugador, que no entraba en los planes del club y de su técnico, Juan Carlos Unzué, y que de hecho no había jugado ni un minuto de los encuentros de pretemporada tras su tardía incorporación, a causa de su participación con Chile –de la que es pieza básica– en la Copa Confederaciones.
El centrocampista se va del Celta tras haber disputado 55 partidos en temporada y media. Eduardo Berizzo, ex entrenador céltico, veía en él al jugador ideal para dirigir su centro del campo, pero las lesiones y la eclosión de Nemanja Radoja lo condenaron a un segundo plano. Tanto es así que el club y él mismo se plantearon su salida este mismo verano. De enorme calidad en el toque y con gran visión de juego y capacidad de marcar el ritmo de los encuentros, a Díaz le faltó la capacidad para mostrarse seguro en el juego sin balón. Con todo, mostró ascendencia sobre sus compañeros y, de hecho, llegó a portar el brazalete de capitán del equipo hasta en tres ocasiones pese al poco tiempo que pasó en el equipo.
Marcelo Díaz hizo pública a través de sus redes sociales una carta de despedida en la que lamentó esa incapacidad para demostrar todo su potencial. "Gracias por tanto, perdón por lo poco", cerró una misiva en la que resaltaba el acuerdo mutuo para la resolución del contrato y mostraba su "absoluto agradecimiento a cada una de las personas que formaron parte de mi vida en los últimos 18 meses y me permitieron vivir esta experiencia inolvidable como ha sido vestir esta camiseta, guardando en mi corazón los más lindos recuerdos". Además, se acordó de sus compañeros, de la afición y de los trabajadores del club.n
