No cabe duda de que la mejor noticia de la semana ha sido el anuncio de Renfe - ¿O es ADIF? – que antes de las Navidades el recorrido del AVE desde Vigo a Madrid tardará un poco más que 4 horas y aún menos desde Coruña a Madrid. Puede que muchos ciudadanos de Galicia no le den demasiada importancia si no necesitan desplazarse a la capital, especialmente por negocios u otras razones, pero los usuarios de la oferta encontraran beneficios complementarios a la alternativa que siempre ha sido el avión desde Peinador, sea cual sea la aerolínea en cuestión. En primer lugar, debo confesar que desde una temprana edad he sido amante de los ferrocarriles. He hecho viajas tan dispares como el transandino de Buenos Aires a Santiago de Chile como el matutino de Washington a Nueva York. Esta última . con desayuno incluido - con salida a las 06:00 de la mañana y llegada a la estación de ‘Penn’ en el centro de la ciudad de Frank Sinatra a las 10:00. Curiosamente unas 4 horas de viaje. Desde la época de la dictadura he cogido el nocturno de Vigo a Madrid (¿Se acuerdan del vagón restaurante de ‘Wagon-Lits’ con camareros de guante blanco?) hasta el de la democracia, aunque creo que ya ha sido suspendido. ¿Porque la preferencia? Piénselo. Los viajes en avión en comparación con los que se pueden hacer por tren tienen los siguientes inconvenientes. Ejemplo el de Vigo-Madrid.
Lo primero es el desplazamiento de la ciudad a Peinador. ¿Taxi, autobús o coche privado? Luego presentarse al mostrador de la aerolínea, dependiendo del equipaje de mano o de bodega. Primero está el control del pasajero por si acaso sea un delincuente. Luego a esperar la llamada de acceder al avión. Puede ser por autobús, a pie o directamente. Comienza la búsqueda de asiento, acomodo, sesión de seguridad de las azafatas/os y esperar el visto bueno de despegue. ¡A volar! Llegamos a Madrid, nos esperan unos familiares o amigos, cogemos un autobús o un taxi. Otro viaje a la capital. Después del recorrido por fin llegamos a nuestro destino. No solo deberíamos preguntarnos cuanto ha tardado este viaje, pero añadir todas las incomodidades de hoy mas que nada por culpa de la seguridad. Ahora vuelvo al tren.
Me presento en la magnífica estación de Vialia en pleno centro de la ciudad. Paso por cierta seguridad, pero nada comparado con el tercer grado de un aeropuerto. Subimos al tren, llevamos a todo nuestro equipaje, nos acomodamos en unos asientos estupendos y esperamos la salida. Durante el viaje podemos levantarnos, acceder al sector de cafetería, observar cómodamente el paisaje maravilloso desde la salida de la verde Galicia, los campos de Castilla y la entrada directamente a la Estación del Norte. ¡En pleno centro de Madrid! Les puedo contar de otros viajes que he hecho en Galicia, siempre en tren que simplemente no tienen comparación. Quizás el mas espectacular fue en el 2014 desde Vigo a Bilbao a coger el vuelo a Manchester al día siguiente. Nada menos que 11 horas. Pase la noche en un hotel del Casco Viejo de la ciudad con un par de horas en un chiringuito bebiendo vino con tapas de boquerones. Volviendo a esta ciudad. ¿No es hora de que se construya una escalera mecánica desde la calle Serafín Avendaño uniendo la estación de Guixar con la de Vialia? Veo muchos pasajeros caminando por esta calle casi a diario ya que vivo en la zona. Es una sugerencia.
Lo primero es el desplazamiento de la ciudad a Peinador. ¿Taxi, autobús o coche privado? Luego presentarse al mostrador de la aerolínea, dependiendo del equipaje de mano o de bodega. Primero está el control del pasajero por si acaso sea un delincuente. Luego a esperar la llamada de acceder al avión. Puede ser por autobús, a pie o directamente. Comienza la búsqueda de asiento, acomodo, sesión de seguridad de las azafatas/os y esperar el visto bueno de despegue. ¡A volar! Llegamos a Madrid, nos esperan unos familiares o amigos, cogemos un autobús o un taxi. Otro viaje a la capital. Después del recorrido por fin llegamos a nuestro destino. No solo deberíamos preguntarnos cuanto ha tardado este viaje, pero añadir todas las incomodidades de hoy mas que nada por culpa de la seguridad. Ahora vuelvo al tren.
Me presento en la magnífica estación de Vialia en pleno centro de la ciudad. Paso por cierta seguridad, pero nada comparado con el tercer grado de un aeropuerto. Subimos al tren, llevamos a todo nuestro equipaje, nos acomodamos en unos asientos estupendos y esperamos la salida. Durante el viaje podemos levantarnos, acceder al sector de cafetería, observar cómodamente el paisaje maravilloso desde la salida de la verde Galicia, los campos de Castilla y la entrada directamente a la Estación del Norte. ¡En pleno centro de Madrid! Les puedo contar de otros viajes que he hecho en Galicia, siempre en tren que simplemente no tienen comparación. Quizás el mas espectacular fue en el 2014 desde Vigo a Bilbao a coger el vuelo a Manchester al día siguiente. Nada menos que 11 horas. Pase la noche en un hotel del Casco Viejo de la ciudad con un par de horas en un chiringuito bebiendo vino con tapas de boquerones. Volviendo a esta ciudad. ¿No es hora de que se construya una escalera mecánica desde la calle Serafín Avendaño uniendo la estación de Guixar con la de Vialia? Veo muchos pasajeros caminando por esta calle casi a diario ya que vivo en la zona. Es una sugerencia.
