Es lo que quiere el gobierno de ultraderecha del Primer Ministro Boris Johnson. Fuera de broma. Aunque el mundo esta ante un posible apocalipsis económico debido a este horror de Coronavirus, los ingleses siguen en la luna con su puñetero Brexit. Quieren volver al mundo del Imperio Británico del siglo XIX y medio siglo XX que fue, gracias a la supuesta revolución industrial hace ya casi dos siglos, y la gran dama del impulso, la Reina Victoria, la Gran Bretaña del Reino Unido que dominaba el mundo. Y hay que reconocer que era verdad.
Desde ferrocarriles a automóviles, transatlánticos a telecomunicaciones, sistemas de agricultura, ganadería y el idioma mismo no existía un rincón del globo terráqueo que no llevaba el sello de ‘Made in England’. Por último, está la democracia y el sistema de gobierno basado en las elecciones de diputados para un parlamento como el de Westminster, quizás el mas antiguo del mundo. ¿Pero que ha pasado desde el fin de la II Guerra Mundial? Sus grandes colonias como la India, Canadá, Australia, Sudáfrica, Hong Kong, Egipto, Kenia, Uganda y decenas de otros mas pequeños se han independizado y siguen su propio destino democrático e independiente. Luego comenzó la era de la Commonwealth que hasta cierto punto resucito una especie de colonialismo ‘a la carta’ con la Corona Británica como un símbolo de unión basado mas en la fraternidad que otra cosa.
Paralelamente se abría un nuevo camino en Europa para consolidar un pacto supuestamente no agresivo y enterrar de una vez los conflictos bélicos de siglos, especialmente después de dos guerras mundiales. Nacía la futura Unión Europea. Gran Bretaña entró a formar parte en los años 70 gracias a la Primera Ministra de entonces, la Sra. Margaret Thatcher. Aunque gobierno tras gobierno británico no hacia mas que rezongar sobre las exigencias de esta nueva unión, tanto el Reino Unido como la Unión Europea contribuyeron mutuamente en el éxito que ha sido hasta la fecha este gran proyecto europeo.
Desgraciadamente, y ya he escrito una plétora de artículos sobre el mismo tema, aparecieron hace veinte años un par de individuos antieuropeos, Nigel Farage (eurodiputado) y el actual PM, Boris Johnson que comenzaron una increíble campaña de lavado de cerebro al pueblo ‘ingles’ de que la Unión Europea era un desastre y que Gran Bretaña debería marcharse y volver a ser ‘libre’ del yugo de la Comisión Europea. Esto ya lo saben ustedes dilecto/a leyente/a desde hace tiempo. ¿Pero la cuestión es, ahora que los ingleses siguen empeñados en largarse, que demonios pueden ofrecer hoy en día al resto del mundo si ya no producen ni construyen nada de lo que hicieron hace mas de un siglo? ¿La City con los bancos y los expertos financieros? ¿Las universidades? ¿El idioma? ¿Los caladeros de pesca? Esto último se convertirá en una nueva batalla campal. ¿Turismo rural? En estos momentos están desesperados en llegar a acuerdos comerciales con USA, Australia y Nueva Zelandia. Esperan que luego podrán negociar individualmente con los países europeos.
Pero insisto. ¿Qué pueden vender que no producen otros países del mundo? La respuesta es simple. ¡Nada! Sin embargo, sigue siendo un gran país si no fuese por la política y políticos imperialistas que continúan anclados en el pasado. Como ocurre en tantos países del mundo desarrollado. Las instituciones siguen su curso y funcionan, léase la ciencia, la sabiduría, la cultura, la libertad y la misma historia para dar ejemplos. La única solución sería la recapacitación del gobierno de retroceder en su empeño de marcharse el 1 de enero del 2021.
