El técnico vigués entrenará al equipo amarillo en Primera Estatal
La UD Mos debutará la próxima temporada en una categoría nacional. Lo hará en Primera Estatal tras lograr el ascenso el curso pasado. Y aunque en la entidad quieren disfrutar del momento y celebrar lo conseguido -debido a la pandemia no han podido- ya han empezado a perfilar las líneas maestras con las que afrontarán el reto. La primera es el fichaje de Víctor González, que dirigirá al equipo mosense formando tándem técnico con Telmo González.
El técnico vigués se compromete por una temporada con el Mos tras dirigir al Sárdoma la pasada campaña. El equipo blanquiazul, al que este año entrenará David Ferreiro, concluyó en la novena posición de la tabla tras un buen inicio y una segunda parte de la temporada con peores resultados. Ahora pone al servicio del recién ascendido su experiencia en la categoría para su estreno en la Primera Estatal.
Aun con la incertidumbre de no saber cuándo comenzará la liga, ni siquiera de cuántos equipos competirán -falta saber si ascenderá el Monte y qué clubes pueden superar la afectación económica de la crisis-, el objetivo es claro: lograr la permanencia. A partir de ahí, que sea el campo y la pelota los que marquen los límites. Para conseguirlo, la idea del club es ofrecer la mayor continuidad posible al bloque que ha logrado el ascenso. Luego, en función de qué jugadoras sigan o no, se completará la plantilla con fichajes.
Además, el Mos tendrá el soporte de una cantera que no para de crecer. La apuesta del club amarillo por el fútbol femenino ha abarcado toda una estructura y no solo al primer equipo. Son en torno a un centenar de jugadoras de todas las edades las que conforman el sólido armazón de la entidad mosense, derivado de su trabajo de base en los últimos años. De esta manera, el club amarillo ha conseguido configurar cuatro formaciones 100% femeninas: el citado primer equipo, que la próxima temporada debutará en Primera Estatal, un infantil de liga gallega, un promesas, conformado por niñas en edad prebenjamín, benjamín y alevín, y un filial que se va a crear para el siguiente curso. n
El técnico vigués se compromete por una temporada con el Mos tras dirigir al Sárdoma la pasada campaña. El equipo blanquiazul, al que este año entrenará David Ferreiro, concluyó en la novena posición de la tabla tras un buen inicio y una segunda parte de la temporada con peores resultados. Ahora pone al servicio del recién ascendido su experiencia en la categoría para su estreno en la Primera Estatal.
Aun con la incertidumbre de no saber cuándo comenzará la liga, ni siquiera de cuántos equipos competirán -falta saber si ascenderá el Monte y qué clubes pueden superar la afectación económica de la crisis-, el objetivo es claro: lograr la permanencia. A partir de ahí, que sea el campo y la pelota los que marquen los límites. Para conseguirlo, la idea del club es ofrecer la mayor continuidad posible al bloque que ha logrado el ascenso. Luego, en función de qué jugadoras sigan o no, se completará la plantilla con fichajes.
Además, el Mos tendrá el soporte de una cantera que no para de crecer. La apuesta del club amarillo por el fútbol femenino ha abarcado toda una estructura y no solo al primer equipo. Son en torno a un centenar de jugadoras de todas las edades las que conforman el sólido armazón de la entidad mosense, derivado de su trabajo de base en los últimos años. De esta manera, el club amarillo ha conseguido configurar cuatro formaciones 100% femeninas: el citado primer equipo, que la próxima temporada debutará en Primera Estatal, un infantil de liga gallega, un promesas, conformado por niñas en edad prebenjamín, benjamín y alevín, y un filial que se va a crear para el siguiente curso. n
