ALERTA SANITARIA

Los niños de Vigo se quedan en casa con sus padres

Miguel Areses y Eva Rodríguez, jugando ayer al Monopoly con los pequeños Elena, Miguel e Inés.
photo_camera Miguel Areses y Eva Rodríguez, jugando ayer al Monopoly con los pequeños Elena, Miguel e Inés.
La asistencia a los centros educativos de la ciudad fue mínima en la jornada de transición antes del cierre de colegios a partir del lunes

 A partir de este lunes las aulas quedarán vacías tras el cierre decretado por la Xunta, aunque ayer durante la auténtica jornada de transión en los colegios, los centros vigueses apenas tuvieron actividad con la presencia de un reducido grupo de alumnos o incluso, sin ninguno. Ante la amenaza del contagio del coronavirus los padres vigueses han optado mayoritariamente por mantener a los mnores en casa. Ejemplo de ello son Miguel Areses y Eva Rodríguez, padres de dos niños que también cuidaron de una sobrina. "Tenemos dos hijos y somos un montón en la familia. Por nuestro trabajo podemos hacernos cargo del cuidado de los niños y también de algún que otro sobrino", comentó Miguel, asegurando que "tenemos la responsabilidad de hacernos cargo nosotros y no los abuelos".
    Eva fue la encargada de acompañar a los menores durante la mañana de ayer, disfrutando de un día libre, "pero recordando que no son unas vacaciones y nos hacen preguntas sobre lo que está pasando". Esta pareja indica a su vez que tuvo claro desde que el jueves se anunció el cierre de los colegios que sus hijos no acudirían ayer a las aulas. "Cuando ves lo que pasa en Italia te das cuenta de que en cualquier momento pueden cerrar los colegios y te preparas. No dudamos ni un instante y para la semana vamos a tener a un par de sobrinos más en casa", cuenta Miguel.
   Los centros educativos ya trabajan en materiales con los que estos menores podrán seguir su formación académica durante los próximos días, como destaca Vanesa Villa, presidenta de la Federación de Anpas del suroeste de Galicia (Surgapa): "Tanto padres como profesores estamos pendientes de todas las novedades e indicaciones que haya", indicó Villa.
   A pesar de que la ausencia en las aulas fueron notables, algunos padres no pudieron anticiparse y encontrar a alguien para dejar al cargo a sus hijos. "En casi todos los colegios hubo actividad no lectiva aunque con menos niños. A partir de lunes los padres deben hacer un esfuerzo para normalizar la situación en casa", afirmó Bertila Fernández, portavoz de Foampas.
   Por su parte, docentes de la comarca mostraban ayer su desacuerdo con las medidas tomadas por la Xunta al señalar que se "obligaba a la presencia del profesorado". La Consellería de Educación emitió ayer una actualización de las medidas en las que determina que la presencie del personal docente desde este lunes será determinada por los equipos directivos de los centros a excepción de aquellos con menos de seis unidades. 

último día en el colegio antes de la suspensión de las clases

“A partir del lunes los padres tendrán que planear bien qué hacer”

María José Rodríguez y Macarena.

 María José Rodríguez es la abuela de la pequeña Macarena, alumna del colegio Compañía de María. "El aviso del cierre de los colegios fue tan repentino que no hubo manera de organizarse para que se quedase en casa, menos mal que permitieron a los padres traer a los niños al colegio hoy", afirmó María José a la hora de recoger a su nieta. En este centro los niños pudieron disfrutar de una jornada de juegos y algunos de ellos todavía continuaron hasta finalizar el horario de comedor.
   Esta abuela señaló que le parece "correcta" la medida de suspender las clases por el coronavirus y recalcó "que es muy importante que los niños estén protegidos porque en el colegio, jugando unos con otros es fácil que puedan contagiarse si alguno está enfermo".
   A partir del lunes, explicó María José, "todo va a ser distinto y los padres tendrán que planear bien qué hacer y organizarse", lamentando que "en muchos puestos de trabajo no se está poniendo fácil la posibilidad de trabajar desde casa". 

“Mis hijas no estarán con sus abuelos, nos organizaremos nosotros”

Carlos López y Paula.

 Carlos López comentó que "no tuvimos otra alternativa que traer a la niña al colegio por el trabajo". Padre de Paula y otra niña, este vigués fue tajante a la hora de afirmar que "a partir del lunes, me encargaré de mis hijas aunque tenga que ir a trabajar", destacando que "tengo muy claro que no voy a poner en peligro a los abuelos pidiéndoles que las cuiden".
   

Para Carlos, la suspensión de las clases es una "medida necesaria" que debería haberse tomado días antes. "Tendríamos que haber empezado a prevenir el contagio del coronavirus antes y que comunidades como Galicia o Asturias decidan cerrar los centros escolares con este número de casos me parece correcto. Creo que Madrid no se adelantó de esta manera y ahora está la situación como está", afirmó. 
   Carlos es comercial y cree que será posible conciliar su trabajo con el cuidado de sus hijas en las próximas semanas. "Mi mujer tiene un viaje de trabajo la próxima semana y no sé si podrá realizarlo. Creo que deberían facilitarnos a todos poder aislarnos", añadió 

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