Cerca de 30.000 personas pueden sufrir dermatitis atópica en la ciudad, una dolencia que en el 90% de los casos cursa de forma leve y para la que hay tratamientos eficaces
Cerca de 30.000 personas podrían tener dermatitis atópica en la ciudad de Vigo. Es una enfermedad crónica muy frecuente que afecta a una de cada diez personas y que se caracteriza por provocar irritación en la piel, un enrojecimiento, una descamación o la secreción de líquido. Las causas son desconocidas, aunque uno de los factores que incluyen en su aparición es el genético.
El dermatólogo del área sanitaria de Vigo Ignacio García Doval asegura que el 90% de las personas que tienen dermatitis atópica son casos leves, por lo que se solucionan con cremas y con unos cuidados mínimos como hidratación, evitar los irritantes o llevar ropa de algodón.
Menos del 10% de los pacientes son casos graves que necesitan otro tipo de tratamiento. Esto hace que la mayoría de las personas sean atendidas en Atención Primaria, mientras que solo los más graves necesitarían acudir a la consulta del dermatólogo.
La dermatitis atópica va en aumento en las últimas tres o cuatro décadas, pero no se conocen los motivos. A la pregunta de si hay más dermatitis atópica en la ciudad que en el medio rural, afirma que es así pero que no se saben las causas. Con todo, señala que hay una hipótesis por la cual el exceso de higiene puede hacer más frecuente la dermatitis atópica, pero “no estamos completamente seguros de que eso sea así”.
En cuanto a los tejidos que irritan la piel, señala que la ropa de fibra o lana en contacto con la piel, sobre todo cuando se suda más, causa problemas a los atópicos.
Evitar la fibra
García Doval apunta que actualmente ven dos situaciones frecuentes. Por un lado, a las personas que salen a correr o que realizan otras actividades físicas con ropa técnica deportiva, que normalmente es de fibra y elástica, se les suele irritar la piel si tienen este problema dermatológico.
Por otro lado, los uniformes escolares, que son de fibra casi todos, pueden provocar también esta reacción a los niños que tienen esta dolencia, aunque es posible que muchos centros educativos tengan en cuenta esta circunstancia y permitan en estos casos prendas que eviten el problema.
Aunque puede aparecer a cualquier edad, es más frecuente en niños y mayores. Suele comenzar en la infancia. “Son niños a los que se le irrita la piel más fácilmente de lo habitual y suele afectar a la zona del pañal, a los pliegues y a la cara. Con los años va modificándose y afecta sobre todo a los pliegues y a las manos. Les irrita la piel y en algunas personas se asocia con otras enfermedades como el asma principalmente”, explica.
García Doval asegura que hubo muchos avances en los tratamientos en los últimos años. En el propio Hospital Álvaro Cunqueiro hay actualmente varios estudios activos, de nuevos medicamentos, estudios observacionales, entre otros. El dermatólogo apuntó sin embargo que los tratamientos de siempre siguen funcionando bien para muchos pacientes, que mejoran su bienestar. “Es una enfermedad muy incómoda, que provoca sufrimiento e impide dormir a muchos pacientes, pero hay tratamiento para todos y funciona”, asegura.
