El detalle de Muse con Galicia y la reina Isabel II en el concierto de Balaídos

El batería de Muse, Dom Howard, con la bandera de Galicia en Balaídos.
photo_camera El batería de Muse, Dom Howard, con la bandera de Galicia en Balaídos.

La conmoción por el fallecimiento de la reina y el amor por la comunidad, los mejores momentos del macroconcierto

Muse ha sido el elegido para retomar uno de los momentos más simbólicos de la ciudad: los macroconciertos al estadio de Balaídos tras más de 20 años. La tarea de volver a llenar el estadio de música en directo y vibrar con sus seguidores no resultaba nada fácil, pero lo consiguieron. Fue una jornada atípica que probablemente la banda recordará para siempre. Apenas unas horas antes de comenzar, conocieron la noticia del fallecimiento de la reina Isabel II, toda una referencia a nivel internacional. Para los británicos la monarquía es un pilar básico, por lo que la consternación de los integrantes de la banda ya se daba por hecho. Pese a todo, no decepcionaron con su espectáculo, llegando a hacer incluso referencias a este trágico suceso que paralizó al mundo entero y, por qué no, también a Galicia.

 

Muse, 'in love' con Galicia

Bailes, coreos, gritos... En el estadio de Balaídos sucedió de todo. Horas antes del espectáculo el diario preguntaba en las inmediaciones a los asistentes si esperaban que los integrantes de Muse hiciesen algo por Vigo y Galicia. La mayor parte de ellos coincidieron en que sí, que algo se venía.  "No son mucho de banderas", respondió uno de los fans.  Finalmente, los músicos sorprendieron con una bandera de Galicia que ondearon por todo el escenario., En sus redes sociales, los fans no tardaron en responder lanzando un bonito mensaje a través de  Twitter: "Os amamos hasta la muerte #MuseVigo". Tras este gesto memorable, la emoción se apoderó de todo el campo.

 

La muerte de Isabel II también protagonizó una de las anécdotas del espectáculo. El grupo tocó brevemente la melodía de 'God save the Queen' a la guitarra. Fueron solo unos segundos introductorios que dieron pie a otra canción. Un gran homenaje que los británicos quisieron dedicar a su reina.

 

Muse se convirtió en la actuación más esperada de este verano. Tras varias dificultades, a las que se sumó la falta de entendimiento entre el Gobierno gallego y el Concello pudo celebrarse, incluso con mayor aforo del que estaba previsto inicialmente. Fueron  más de 17.000 personas las que asistieron al evento. Las entradas se agotaron en apenas unos minutos. Se cree que este espectáculo puede suponer un antes y un después en la organización de los macroconciertos en la ciudad. En el año 1990, Madonna causó gran emoción al portar una camiseta del Celta sobre el escenario. En esta ocasión, el grupo de rock quiso emprender un pequeño tributo a Galicia. Todo apunta a que sigue quedando espacio para las anécdotas, que continúan dos décadas de parón.

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