No tiene más valor que político, que no jurídico, pero el voto a favor de la dimisión de la alcaldesa Victoria Portas, de ACE, ha demostrado la crisis absoluta en que se encuentra el gobierno local, formado por tan solo cuatro de los 21 concejales de la Corporación, y uno de ellos, Aurora Prieto, enfrentada a la regidora, que lleva en el cargo desde febrero del pasado año. En esta ocasión fue una moción del PP en el pleno en la que se pedía una reprobación a la regidora por no haber cedido los terrenos para el centro sanitario cangués y donde se reclamaba además su dimisión. Para sorpresa, o no, general, el PSOE unió sus votos (cuatro) a los seis del PP (faltaba uno), mientras que ACE solo logró el respaldo del BNG. Y no por completo, ante la abstención de Prieto, que tampoco fue una sorpresa en realidad.
Hace apenas unos días, la propia Aurora Prieto aseguraba que desde finales del mes de octubre, Victoria Portas la bloqueó de WhatsApp tras celebrarse una Mesa de Turismo que ella preside. Según el relato que hizo a Europa Press, Portas la llamó "incompetente" y "desconocedora" de la situación del Ayuntamiento cuando se enteró de que Prieto habría hablado mal de algún miembro del gobierno local, lo cual ella niega. Incluso aseguró que no veía ningún motivo para apoyar al gobierno local. Tampoco lo tiene el PSOE e incluso dentro de ACE, como ha quedado demostrado. Sin embargo, no hay posibilidad de que Portas deje de ser alcaldesa, salvo que ella dimita, lo que no parece probable. El eterno Mariano Abalo reprochó el voto de la oposición, que a su vez sacó la lista de agravios supuestamente cometidos por Abalo en el pasado.
No obstante, salvo sorpresa, Victoria Portas podrá finalizar el mandato que inició en febrero de 2021 porque no cabe una moción de censura por falta de respaldo político y menos a seis meses de las nuevas elecciones, donde el laberinto cangués probablemente seguirá igual de complicado. Portas accedió a la Alcaldía de Cangas en sustitución del fallecido Xosé Manuel Pazos. Su candidatura fue avalada en el pleno, en votación secreta, por 11 votos a favor y tres en blanco.
Pese al respaldo obtenido entonces, no fue en absoluto fácil su designación, que estuvo en el aire hasta el último momento. De hecho, Victoria Portas llegó a la sesión plenaria de investidura tras conseguirse un acuerdo un extremis entre los ediles afines a Mariano Abalo y los dos de EU que forman parte de ACE, pero con los que había y todavía hay diferencias encontradas, y tras recibir el visto bueno, en una reunión celebrada a primeras horas del mismo día, del PSOE, con los que gobernaba. Ahora, todo abierto para las siguientes municipales, donde cualquier cosa puede ocurrir.
