El PP está en disposición de ganar las elecciones generales del 23 de julio en el conjunto de España, a una semana de los comicios, aunque la victoria sería insuficiente para gobernar en solitario. El partido liderado por Alberto Núñez Feijóo necesitaría el apoyo de Vox. Mientras, la izquierda queda lejos de los 176 diputados que marcan la mayoría absoluta, que no podría alcanzar ni con el apoyo de nacionalistas y regionalistas.
Así se desprende de la encuesta de Infortécnica para Atlántico, elaborada con 1.191 entrevistas telefónicas. El PP obtendría, con cerca del 35% de los apoyos, entre 130 y 136 diputados, una considerable subida respecto a los 89 obtenidos en 2019. En el mejor de los casos, los populares se quedarían a 40 escaños de la absoluta.
El PSOE, que ganó los anteriores comicios, se quedaría sin opciones de revalidar el actual gobierno de coalición, pese a que apenas perderían apoyo de la ciudadanía respecto a 2019, al compensar las fugas hacia otras formaciones recuperando una parte del votante de Podemos, fruto del previsible descenso de la plataforma Sumar. Pedro Sánchez obtendría entre 108 y 114 escaños (ahora tiene 120) y recibe mayor intención directa de voto que los populares, si bien con la corrección por recuerdo de voto en 2019, su estimación cae al entorno del 27% de los sufragios.
La tercera posición sería para Vox, cuyo candidato, Santiago Abascal, está en disposición de obtener un resultado similar al de 2019, con entre 50 y 54 escaños (ahora ocupa 52), y una estimación de voto similar a la de 2019.
Por su parte, Sumar, plataforma liderada por Yolanda Díaz, apenas conseguiría entre 21 y 24 actas (muy por debajo de las 35 de Unidas Podemos en 2019), rondando el 10% del voto estimado.
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En el peor de los casos, PP y Vox sumarían 180 diputados (5 por encima de la absoluta), mientras que PSOE y Sumar alcanzarían 138 diputados en su horquilla más alta, lo que haría insuficiente el apoyo del resto de fuerzas del hemiciclo (31-34).
