El Barrio regresó a los escenarios tras casi tres años retirado y lo hace por la puerta grande. Inmerso en la gira de presentación de su último trabajo “Hijo de Levante”, llega este sábado al Auditorio de Beiramar, donde tiene asegurado el lleno, ya que a tres días del concierto tan solo quedan 150 localidades a la venta.
En la entrevista que concertó con Atlántico se mostró reservado, de pocas palabras, pero lleno de inspiración y sensibilidad.
Dicen que “Hijo de Levante” es su disco más personal. ¿Lo siente así?
Sí y está recibiendo muy buena acogida en los conciertos. Trato temas que interés social como el alzheimer o el maltrato, que están muy presentes en la sociedad. Mi intención fue hacer un disco cotidiano, muy de andar por casa, pero también con asuntos de actualidad.
¿Su apuesta por fusionar el flamenco con otros estilos ha sido bien aceptado por los puristas?
Yo no tengo ese problema. Creo que a los puristas hay que dejarlos tranquilos y ellos a los demás. Acompaño al flamenco con todo el tipo de música que me interesa. El que toca flamenco puede con cualquier estilo, pero no cualquiera puede con el flamenco. Lo cierto es que la guitarra es universal.
Lleva El Barrio como nombre artístico en honor a Santa María. ¿Qué le dio su barrio para este homenaje?
Me dio mi identidad y todo lo que tengo. La inocencia y hasta el nombre.
¿Continúa siendo un vecino de barrio?
Me veo una persona muy normal. No aspiro a grandes cosas, me considero muy de andar por casa. Reconozco que soy una persona tímida y por eso no me gustan mucho las entrevistas.
¿Cómo lleva entonces la fama?
No me resulta fácil cuando me reconocen por la calle. Me gusta pasar desapercibido y la gente siempre pregunta por la música y por mi trabajo.n
