Consejos prácticos para cuidar tu salud financiera

ad1

Tener una economía saneada no sólo es fundamental para quien tiene un negocio. A nivel particular también es necesario cuidar el presupuesto.

En la última década hemos visto cómo la economía mundial ha pasado por momentos muy duros. Una situación que no solo afecta a nivel de grandes cifras, sino que las pequeñas economías también se han visto involucradas. Y es que los ciudadanos somos, en última instancia, los que acabamos más perjudicados cuando hay problemas financieros.

Por ello es tanto o más importante saber cómo cuidar de nuestro bolsillo y tener una buena base de educación financiera. Si quieres cuidar de tu bolsillo y saber cuándo es buena idea recurrir a los préstamos inmediatos, estos consejos son lo que estás buscando.

Algo evidente pero esencial

El primer consejo puede resultar obvio aunque en muchas ocasiones es en lo último en lo que se piensa: debemos tener unos ingresos superiores a los gastos corrientes. De lo contrario no solo tendremos problemas para llegar a final de mes, sino que el día en el que nuestra cuenta se quede a cero cada vez será más cercano al del cobro de la nómina.

Echa un vistazo a los gastos que tienes en un mes y réstalos de los ingresos. Si el resultado es negativo, necesitas hacer ajustes de manera urgente. Si consigues que haya saldo a favor, perfecto. Así podrás poner en práctica el segundo consejo.

Crea un fondo de reserva

Es mejor que no malgastes la cantidad que va quedando cada mes, sea grande o pequeña. Necesitas crear una reserva con la que hacer frente a determinados imprevistos. Si puedes afrontarlos con los fondos disponibles, podrás seguir durmiendo tranquilamente, al saber que no debes nada y que puedes seguir atendiendo tus obligaciones financieras.

¿Hace falta un préstamo? Estudia las opciones

Si después de hacer los cálculos te das cuenta de que el fondo de reserva no es suficiente para afrontar un pago imprevisto o necesario, tendrás que pedir un préstamo. Lo mejor es que eches un vistazo a la oferta que hay en Internet, ya que existen muchas entidades de crédito online que ofrecen condiciones muy interesantes.

Por ejemplo, si es tu primera vez podrás acceder a préstamos sin intereses, que algunas empresas especializadas ofrecen como incentivo para captar a nuevos clientes. Una fórmula muy interesante que puedes aprovechar cuando realmente lo necesitas.

¿Qué tipo de cosas pueden ser necesarias y hacer que nos haga falta un crédito? Aquellas sin las que es evidente que no podemos estar, como un coche, una vivienda o los electrodomésticos, así como el mantenimiento de ellos. La cantidad y el plazo son diferentes en cada caso, claro está, pero cubrir una necesidad sí entra en los planes de una buena educación financiera.

No te endeudes por cosas que no necesitas

Por otro lado, es importante saber cuándo no es buena idea pedir un crédito. Y es que hay quien se endeuda de forma innecesaria simplemente por darse un capricho que es totalmente prescindible. Pagarse unas vacaciones de lujo, comprarse un coche de gama alta o hacer regalos muy costosos que no nos podemos permitir nunca es positivo si para conseguirlo hay que endeudarse.

No decimos que no se pueda disfrutar de todas estas cosas o que no podamos tenerlas si nuestra economía nos lo permite. Solo que para acceder a ellas no es buena idea pedir un préstamo, que por otro lado puede hacer falta de verdad un poco más adelante. Y si ya se está pagando un crédito por alguno de estos caprichos, posiblemente nos veamos en apuros bastante serios.

Aprovecha los comparadores

En Internet hoy existen montones de páginas de comparativas, que pueden ayudarte a cuidar tu economía de manera efectiva. Un ejemplo son los comparadores de mini créditos inmediatos, que puedes utilizar una vez que tienes claro que se trata de algo necesario.

Un comparador online te ayudará a localizar la mejor opción, tanto por las condiciones que ofrece cada préstamo como por las ofertas especiales que puede tener una entidad en este momento. Si logras ahorrar en comisiones e intereses, podrás tener la satisfacción de poner en práctica tu educación financiera. Y es seguro que tu bolsillo también te lo agradecerá.

Te puede interesar