"El criterio que se sigue no está siendo el mismo para todos los equipos y jugadores", afirma el presidente del Celta
Tres días después del partido que disputaron el Celta y el Granada el pasado domingo en Balaídos, el club vigués continúa molesto por la manera en que se utilizó VAR y por cómo se aplicó la nueva norma del tendón de Aquiles, circunstancias que hicieron que el equipo celeste se quedara con dos hombres menos antes de la media hora de juego, por las expulsiones de Jorge Sáenz y Fran Beltrán.
Aunque la entidad céltica ya anunció el lunes que no presentará alegaciones por las tarjetas rojas que vieron tanto Saénz como Beltrán, ayer la Cadena Cope hizo públicas unas declaraciones del presidente y máximo accionista del club, Carlos Mouriño, en las que criticaba de nuevo la poca fiabilidad que está demostrando en ocasiones el uso del vídeoarbitraje.
"Nosotros no cuestionamos el VAR, no cuestionamos a los árbitros, pero sí el criterio. El criterio que se sigue no está siendo el mismo para todos los equipos ni para todos los jugadores. Creo que el VAR va a producir el efecto contrario en este tipo de faltas. Jugadores que se quejan, que se tiran al suelo, que exageran y que hacen entrar al VAR de oficio", indicó Mouriño, que como el resto de los dirigentes y los aficionados del Celta asistió con incredulidad e indignación a las decisiones arbitrales que acabaron decidiendo el partido contra el Granada.
El colegiado del encuentro, el navarro Eduardo Prieto Iglesias, expulsó a los diez minutos a Jorge Sáenz por pisar en el tendón de Aquiles a Soldado. Aunque en un principio no consideró la acción ni merecedora de tarjeta, las muestras de dolor del delantero del Granada llevaron a la revisión de la jugada y, a instancias del responsable del vídeoarbitraje, el aragonés Santiago Jaime Latre, Prieto Iglesias mostró la roja directa al central del Celta.
En el minuto 24, Fran Beltrán perdió el balón tras recibir una falta y al intentar recuperarlo, impactó con los tacos en la pierna de Antonio Puertas. Prieto Iglesias le mostró en principio una cartulina amarilla, pero tras revisar la jugada en el vídeo, la cambió por una roja.
Durante el pasado fin de semana se produjeron acciones similares a la de Jorge Sáenz en otros partidos de Primera División –una idéntica estuvo protagonizada por el excéltico Maxi Gómez en el Barcelona-Valencia– que no fueron revisadas e incluso hubo una en el mismo choque de Balaídos, en el que Germán pisó por detrás a Santi Mina, lo que aumentó a indignación de los representantes del Celta, que aun así no presentarán recursos. n
Aunque la entidad céltica ya anunció el lunes que no presentará alegaciones por las tarjetas rojas que vieron tanto Saénz como Beltrán, ayer la Cadena Cope hizo públicas unas declaraciones del presidente y máximo accionista del club, Carlos Mouriño, en las que criticaba de nuevo la poca fiabilidad que está demostrando en ocasiones el uso del vídeoarbitraje.
"Nosotros no cuestionamos el VAR, no cuestionamos a los árbitros, pero sí el criterio. El criterio que se sigue no está siendo el mismo para todos los equipos ni para todos los jugadores. Creo que el VAR va a producir el efecto contrario en este tipo de faltas. Jugadores que se quejan, que se tiran al suelo, que exageran y que hacen entrar al VAR de oficio", indicó Mouriño, que como el resto de los dirigentes y los aficionados del Celta asistió con incredulidad e indignación a las decisiones arbitrales que acabaron decidiendo el partido contra el Granada.
El colegiado del encuentro, el navarro Eduardo Prieto Iglesias, expulsó a los diez minutos a Jorge Sáenz por pisar en el tendón de Aquiles a Soldado. Aunque en un principio no consideró la acción ni merecedora de tarjeta, las muestras de dolor del delantero del Granada llevaron a la revisión de la jugada y, a instancias del responsable del vídeoarbitraje, el aragonés Santiago Jaime Latre, Prieto Iglesias mostró la roja directa al central del Celta.
En el minuto 24, Fran Beltrán perdió el balón tras recibir una falta y al intentar recuperarlo, impactó con los tacos en la pierna de Antonio Puertas. Prieto Iglesias le mostró en principio una cartulina amarilla, pero tras revisar la jugada en el vídeo, la cambió por una roja.
Durante el pasado fin de semana se produjeron acciones similares a la de Jorge Sáenz en otros partidos de Primera División –una idéntica estuvo protagonizada por el excéltico Maxi Gómez en el Barcelona-Valencia– que no fueron revisadas e incluso hubo una en el mismo choque de Balaídos, en el que Germán pisó por detrás a Santi Mina, lo que aumentó a indignación de los representantes del Celta, que aun así no presentarán recursos. n
